Organizadas por el Departamento de Medio Oriente del IRI UNLP y Universidad Austral
La década de 2020 comenzó introduciendo desafíos inéditos para las generaciones contemporáneas. Actualmente, las vicisitudes de la pandemia global del COVID-19 no están resueltas y, sin embargo, la guerra ruso-ucraniana representa el potencial realineamiento de intereses geopolíticos a una escala también global. Este es un mundo de cambios vertiginosos e intercambios acelerados por las nuevas tecnologías. Así, la interpretación de los acontecimientos presentes supone esfuerzos renovados desde las Ciencias Sociales.
A más de una década del estallido de las protestas que desembocaron en la Primavera Árabe, el Medio Oriente atraviesa procesos tales como la continuidad de crisis de representación política, la consolidación de nuevos autoritarismos y el establecimiento de nuevas dinámicas de participación en la esfera pública. Además de la irrupción de crisis económicas como las que enfrenta el Líbano, la región experimenta nuevas relaciones con organismos internacionales, regionales y globales, y con potencias como Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y China. Las guerras civiles en Libia, Yemen, Siria y la situación en Israel/Palestina, implican a su vez, tanto la intervención de actores regionales como de tropas extranjeras.
Pese a la derrota militar del ISIS como consecuencia de la intervención extranjera en Siria e Iraq en apoyo a fuerzas locales, siguen ocurriendo atentados terroristas reivindicados por el grupo. Dicha realidad refuerza la preocupación por las formas globales de riesgo actuales en las que los flujos de información que circulan en las redes sociales constituyen amenazas perniciosas contra las poblaciones. Asimismo, las redes sociales posibilitan el acceso a noticias y facilitan la vinculación entre personas y grupos de un mismo país como también, a nivel transnacional. Las cadenas de solidaridad forjadas al calor de la circulación global de repertorios de acción social han permitido la gestación de nuevas identidades para movimientos sociales y políticos en el Medio Oriente, y empoderado la situación de las mujeres y de diferentes minorías.
Los antagonismos y rivalidades entre el Consejo de Cooperación del Golfo e Irán también presentan facetas con características novedosas conforme la transición de la presidencia de Donald Trump a la de Joseph Biden implica nuevos vínculos de dichas monarquías con Estados Unidos. La concreción de los Acuerdos de Abraham, que cristalizan un proceso de normalización de relaciones diplomáticas entre el Estado de Israel con Bahréin, Emiratos Árabes Unidos, Marruecos y Sudán, ocurre en paralelo a las negociaciones entre Estados Unidos e Irán en torno a la cuestión nuclear.
Este último constituye un punto central en la agenda tanto regional como global, evocando la cuestión del riesgo de las armas nucleares y su articulación con los alineamientos geopolíticos. Asimismo, décadas de consolidación de Rusia y China como potencias supone otro tipo de relaciones globales para los países exportadores de petróleo, considerando la presencia de nuevos socios comerciales, financieros y militares en la región.
En la actualidad, se plantea el desafío para la humanidad de transicionar a fuentes de energía alternativas y limpias, factor que presenta una prospectiva nueva inserción en los mercados para los miembros del Consejo de Cooperación del Golfo. Por otro lado, también hallamos que éste es un mundo en el que la desigual distribución de vulnerabilidades sigue encontrando millones de refugiados en situaciones de extrema precariedad: muchos de ellos oriundos del Medio Oriente y del Gran Medio Oriente.
La paulatina retirada de Estados Unidos de Afganistán y de países como Iraq y Siria también ha suscitado nuevas dinámicas regionales, evidenciándose el empoderamiento de grupos locales en detrimento de minorías etno-religiosas: esto afecta, eminentemente, la situación de las mujeres pertenecientes a dichos colectivos. El creciente aumento de refugiados árabes, musulmanes y/o miembros de grupos minoritarios de la región en Estados Unidos y Europa supone un mundo de mayores inequidades y de convivencias que propician el enardecimiento de discursos racistas y xenofóbicos de extrema derecha articulados con movimientos antidemocráticos, anti-Unión Europea, anti-refugiados y misóginos.
Es así que desde el Departamento de Medio Oriente del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de La Plata, en coordinación con el Núcleo de Estudios de Medio Oriente de la Universidad Austral, convocamos a la recepción de ponencias que problematicen alguna de estas cuestiones. Por ello, proponemos los siguientes ejes articuladores como disparadores temáticos que alberguen contribuciones originales producidas por investigadores de América Latina y el mundo de habla hispana en general, sobre el Medio Oriente contemporáneo.
- Guerra, conflicto y seguridad
- Política, representación y elites
- Economía, trabajo y problemática ambiental
- Identidades culturales, religión y minorías
- El género, la mujer, feminismos
- Ciudadanía y nuevos activismos, tecnología, redes y estudios visuales
- Refugiados y migrantes
A continuación, establecemos las fechas de recepción de abstracts y ponencias:
Abstract: 16 de mayo
Máximo 400 palabras.
Incluir los siguientes datos: nombre y apellido de autores, afiliación institucional (breve descripción), email de contacto, título de la ponencia.
Ponencia completa: 29 de junio
Letra: Times New Roman, 12
Márgenes: normales
Normas de citación: APA
Extensión máxima: 10.000 palabras, incluyendo bibliografía
Realización de las Jornadas: Jueves 29 y viernes 30 de septiembre
Contacto: jornadas.mo@gmail.com
Como resultado de las jornadas, se propone la edición de un libro digital en el que se incluirán ponencias elegidas de cada eje temático. Conforme a ello, se esperará el compromiso de lxs autores en continuar puliendo sus capítulos previa a la publicación, a partir de una evaluación por doble ciego.