La revolución rusa de octubre de 1917 trajo consigo múltiples consecuencias que marcarían el destino político, económico y militar de la futura URSS.
Dicho acontecimiento marcó la segunda etapa de la revolución rusa, teniendo como antecedente la revolución de febrero que había derrocado al régimen zarista para sustituirlo por un gobierno provisional. Su líder, Aleksandr Kerenski, comenzó implementado
medidas que aplacaron el descontento popular, entre ellas se pueden mencionar: la aprobación de la libertad de prensa y de asociación y el retorno de los exiliados políticos, entre ellos el de Vladimir Lenin, simpatizante de la revolución. En el trascurso de esos meses los aires eran de libertad y alivio y la masa de trabajadores y campesino se politizó y se masificó.
Durante período, el pequeño partido bolchevique comenzó a tener cada vez más adeptos, producto de la cooptación discursiva de Lenin, quien centraba su propuesta en una radicalización estratégica de la revolución; en la instalación de un régimen socioeconómico socialista yen la consolidación de la dictadura del proletariado.
Con el pasar de los meses, Gobierno Provisional liderado por los Mencheviques, fue tomando medidas impopulares y se mostró incapaz de hacer reformas que beneficiaran al pueblo. No olvidemos que una de las causas de la revolución rusa fue la grave crisis económica que atravesaba el país, lo cual, sumado a su participación en la Primera Guerra Mundial, impulsaron a los revolucionarios a tomar el poder. No obstante, una vez establecido el gobierno provisional, Rusia no salió de la guerra y la crisis económica se profundizó. Las protestas callejeras aumentaron y la respuesta del gobierno provisional fue la represión y la persecución política.
La revolución de octubre lejos de ser un levantamiento espontáneo, se caracterizó por su planificación y su organización estratégica. Los soviets (la masa de trabajadores, campesinos y soldados politizados), liderados por Lenin y León Trotsky, tomaron los puntos estratégicos de Petrogrado (hoy San Petersburgo) y asaltaron el Palacio de Invierno para derrocar al gobierno provisional. Las principales medidas del nuevo gobierno fueron: la inmediata salida de la guerra, el decreto para distribuir la tierra entre campesinos y la designación del primer consejo de Comisarios del pueblo, presidido por Lenin, que tenía como fin llamar a elecciones democráticas para elegir a una asamblea constituyente. En las elecciones, el partido Bolchevique liderado por Vladimir Lenin, (23,5%) fue derrotado por el partido Revolucionario (41%). Ante esta situación, Lenin mandó a disolver la asamblea elegida democráticamente y estableció un gobierno dictatorial. Años más tarde, el conflicto derivó en una guerra civil en la que se enfrentaron el Ejército Rojo y el Ejercito Blanco.
Durante el enfrentamiento civil, el 20 de diciembre de 1917, se creó la Checa (en ruso Cheká, ЧК — Чрезвычáйная Комиссия, ChK – Chrezvycháinaya Komíssiya, ‘Comisión Extraordinaria’) una organización de inteligencia política y militar soviética que sucedió a la antigua Ojrana zarista. Su objetivo era suprimir y liquidar todo acto contrarrevolucionario o desviacionista. Sus métodos incluían las detenciones masivas, la tortura, los fusilamientos sin juicio previo y la reclusión de sospechosos en campos especialmente diseñados para este fin; los campos de concentración. La checa poseía amplios poderes de acción y ningún tipo de límite legal. Su creación dio inicio a una de las
épocas más sanguinarias de la historia de la humanidad, el Terror Rojo.
En 1924 Lenin se enfermó y se inició entonces una disputa por la sucesión del liderazgo dentro del partido. Los candidatos más importantes eran Lev Trotsky y Joseph Stalin y, a pesar de que todo indicaba que sería Trotsky el elegido, fue Stalin quien logró hacerse con el poder. Tras la muerte de Lenin en 1924, Joseph Stalin asumió el gobierno. Su objetivo era llevar a la Unión de Republicas Socialistas Soviéticas a convertirse en una de las grandes potencias del Siglo XX.
María Sofía Zelaya
Colaborador de la Red Federal de Historia de las Relaciones Internacionales
Departamento de Historia
IRI – U.N.L.P