El pasado 27 de octubre Japón celebró elecciones para la Cámara de Representantes de la Dieta Nacional. El resultado, aunque predecible, no fue menos impactante. El Partido Liberal Democrático (PLD), que ha gobernado el país casi ininterrumpidamente desde 1955, perdió la mayoría absoluta, en uno de los peores resultados de su historia. Por otro lado, los partidos de la oposición lograron avances sustanciales. Por primera vez en muchos años, la dirección de la política japonesa es incierta.
A pesar de que en Japón existen muchos partidos políticos, en la práctica solo uno ha gobernado realmente. Luego de su formación en 1955 el PLD se consolidó rápidamente, logrando una mayoría absoluta en la Dieta y en todos los comités, dándole un control casi total sobre el gobierno. Esta situación se ha mantenido desde entonces. Excepto por dos breves interregnos (1993-1996 y 2009-2012), la mayoría de los primeros ministros (PM) posteriores a 1955 han pertenecido al PLD.
Si bien es cierto que este partido fue el que lideró la recuperación de la posguerra y el ascenso de Japón a la posición de potencia global, su legado no es del todo positivo. Históricamente el PLD se ha aprovechado de algunas fallas en el sistema electoral japonés para mantener su posición. Por ejemplo, entre 1947 y 1994 los límites de los distritos electorales no habían sido revisados, a pesar de la gran migración hacia las ciudades que había tenido lugar. Esto se traducía en una representación desproporcionada del campo, afín al PLD. Dicha situación llevó a la Suprema Corte a declarar ilegítimas las elecciones de 1983 y a amenazar con anular las de 1986 si no se hacían cambios al sistema. (Neary, 2019, p.151)
Este sistema de partido mayoritario, bautizado Sistema de 1955, se ha visto favorecido por la histórica debilidad de la oposición. La misma ha estado siempre atomizada en numerosos partidos con ideologías variadas, lo cual dificulta la formación de un frente unificado. A esto se le suma una cierta inestabilidad. Salvo por el PLD, su aliado Komeito, ninguno de los principales partidos existía antes del 2015. Las dos ocasiones en que partidos opositores han logrado formar gobierno se han debido principalmente a escándalos que minaron la imagen del PLD. Sin embargo, estos períodos han sido breves y aislados. Pese a esto, las tendencias y reformas de las últimas décadas han llevado gradualmente a un debilitamiento del PLD, que desde fines de los noventa depende de su alianza con el partido Komeito para mantener el control del gobierno. A su vez, una nueva oposición se ha ido consolidando.
¿Cómo llegamos a esto?
La gestión del anterior PM Fumio Kishida (2021-2024) se vio atravesada por escándalos. El asesinato del ex PM Shinzo Abe en 2022 puso de manifiesto relaciones entre el PLD y la Iglesia de la Unificación, un movimiento con tintes religiosos surgido en Corea, acusado de tener comportamientos sectarios. El asesino de Abe lo culpaba por la ruina económica de su familia, causada por las cuantiosas donaciones de su madre a la iglesia. Desde entonces han salido a la luz los estrechos lazos entre ambas organizaciones. Estos se remontarían a la década de 1960, bajo el gobierno de Nobusuke Kishi, abuelo de Abe. Ambos grupos compartieron desde un principio la oposición al comunismo, así como una actitud socialmente conservadora, según palabras del presidente de la iglesia Tomihiro Tanaka. Muchos miembros de alto rango del PLD confesaron haber hecho donaciones a y recibido ayuda de la iglesia, sus miembros y organizaciones afiliadas. Este escándalo llevó a Kishida a reestructurar su gabinete dos veces en un plazo de diez meses y minó la confianza de los votantes en su gobierno (Yamaguchi, 2022).
A esto se le sumó un escándalo de corrupción que ha involucrado a casi todas las facciones del partido. A lo largo de este año, investigaciones judiciales revelaron que muchos legisladores del PLD se habían apropiado de cuantiosas sumas de dinero recibidas como donaciones para sus campañas, por supuesto, sin declararlas. Se sospecha que estos fondos se utilizaban para comprar influencias o mantenerlas (son los llamados slush funds) (Mao, 2023). A raíz de esto, el primer ministro disolvió su facción, a la cual le siguieron las demás. Éstas habían jugado durante décadas una función organizadora crucial dentro del partido. Las recientes elecciones por la presidencia del PLD mostraron las implicancias de ésto, con un record de nueve candidatos al puesto. Éstas, sin duda, fueron un intento por renovar la imagen del partido, ante la creciente amenaza su principal rival, el Partido Constitucional Democrático (CDP) y su nuevo líder, el ex primer ministro Yoshihiko Noda. Su nuevo presidente ha estado llevando al reformista CDP en una dirección más moderada, con el fin de captar votantes conservadores de cara a las elecciones que habían de realizarse en 2025.
¿Qué pasará ahora?
El nuevo presidente del PLD y primer ministro, Shigeru Ishiba, ha tenido tradicionalmente el apoyo del público por su posición reformista y crítica hacia la dirigencia del partido, aunque ésto le ha granjeado la antipatía de sus pares. Su elección sin duda demuestra la insatisfacción de los votantes. Quizás en un intento por sacar ventaja de lo que percibía como la aprobación popular hacia él, Ishiba disolvió la cámara baja y llamó a elecciones casi un año antes de lo pautado.
Al final, aunque el PLD sigue siendo el partido con más asientos (191) no ha logrado alcanzar la mayoría absoluta de 233, ni siquiera con la ayuda de su aliado Komeito (24). El CDP ganó 52 asientos, con un total de 148. El partido Isshin no Kai, populista, de tinte neoliberal y a favor de la descentralización, se consolidó como tercera fuerza con 38 asientos. Le siguió el conservador Partido Democrático para el Pueblo (PDP) con 28 asientos. El número de independientes alcanzó un total de 12, muchos de ellos exmiembros del PLD expulsados a raíz del escándalo de corrupción, que ganaron en sus distritos. Algo que vale la pena resaltar es el bajo porcentaje del padrón electoral que votó en estas elecciones (53%), uno de los más bajos en la historia.
Para mantener la mayoría el PLD necesitaría ampliar la alianza. Pero tanto Isshin como el PDP ya se han manifestado en contra de ésto. La otra posibilidad es la de negociar el apoyo de los demás partidos para cuestiones individuales. A ésto se le suma que Yoshihiko Noda ha manifestado su intención de formar una alianza de oposición con el fin de disputar el puesto de PM a Ishiba. Sea cual fuere el caso, el debate parlamentario sin duda ocupará un lugar más importante en el gobierno de Japón.
Además de las polémicas del PLD hay muchos otros temas que han influido en la elección y que se convertirán en el centro de atención. En Japón las parejas casadas deben adoptar un mismo apellido, siendo casi siempre la mujer quien adopta el del varón. El CDP se ha comprometido a impulsar legislación para permitir a las parejas mantener apellidos diferentes, una cuestión polémica dentro del PLD. Noda también se ha manifestado a favor de un sistema legal que permita el matrimonio igualitario y proteja a las minorías sexuales. Además, el CDP se ha comprometido a tomar medidas para reducir el elevado costo de vida. Este problema se ha agudizado a raíz de la reciente devaluación del yen.
La cuestión de la Defensa promete seguir ocupando un lugar central en el discurso político. El PLD había hecho avances sustanciales para reinterpretar la constitución pacifista de Japón y permitirle un rol militar más activo en la región (apoyar a sus aliados). Sin embargo, este tema siempre ha sido polémico. El CDP se ha opuesto tradicionalmente a cualquier modificación de la constitución, sobre todo en lo que respecta a la cuestión bélica. Sin embargo, la creciente inestabilidad regional y la hostilidad de China ponen en duda la practicidad, y hasta la posibilidad, de seguir manteniendo la tradicional actitud pacifista.
No hay manera de saber adónde se dirigirá la política japonesa. Quizás la historia se repita y el PLD regrese al poder en un par de años. O quizás éste sea el inicio de una era multipartidista. Lo único que está claro es que ni siquiera Japón, otrora un bastión de estabilidad, ha logrado escapar a la incertidumbre que reina actualmente. Solo queda esperar y ver lo que depara el futuro.
Pablo Bonelli
Integrante
Centro de Estudios Japoneses
Departamento de Asia y el Pacífico
IRI-UNLP
USAL
Bibliografía consultada
Gemma, N. (2024, octubre 8) Japan’s opposition CDP focuses on separate surnames in election pledge to contrast with LDP. Mainichi Shinbun. https://mainichi.jp/english/articles/20241008/p2a/00m/0na/006000c
Liberal Democratic Party of Japan (LDP) A History of the Liberal Democratic Party, The Formation of the Liberal Democratic Party. https://www.jimin.jp/english/about-ldp/history/104257.html
Mao, F. (2023, diciembre 22) Japan: Corruption scandal threatens PM Kishida’s government. BBC. https://www.bbc.com/news/world-asia-67783043
Neary, I. (2019) The State and Politics in Japan. Polity Press.
NHK WORLD-JAPAN (2024, octubre 28) Japan’s new political landscapeーNHK WORLD-JAPAN NEWS [Video] YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=PbjyYhdS0Vo&ab_channel=NHKWORLD-JAPAN
Takenaka, H. (2024, junio 18) Demise of Factions Boosts Prime Minister Kishida’s Prospects, Clouding LDP Outlook. Nippon.com. https://www.nippon.com/en/in-depth/d01000/
TLDR News Global (2024, octubre 29) Japan’s LDP Loses: What’s Next? [Video] YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=wA3fAzUYF-8&ab_channel=TLDRNewsGlobal
TLDR News Global (2024, septiembre 16) Who Will be Japan’s Next Prime Minister? [Video] YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=88WbnUm1cnE&ab_channel=TLDRNewsGlobal
Yamaguchi, M. (2022, Agosto 10) Japan PM purges Cabinet after support falls over church ties. The Associated Press. https://apnews.com/article/japan-fumio-kishida-names-new-cabinet-fe083fb6a0f4861116be798c76649c2e