El 5 de marzo de 2013, hace 10 años, se anunciaba el fallecimiento del presidente venezolano Hugo Chávez tras una infección respiratoria causada por una intervención quirúrgica en su lucha contra el cáncer. Fue así como días más tarde el vicepresidente, Nicolás Maduro, asumió la presidencia interina el 8 de marzo de 2013; al día siguiente el Consejo Nacional Electoral (CNE) llamó a elecciones presidenciales.
Los principales frentes políticos disputados en las elecciones eran el Gran Polo Político (GPP), encabezada por Nicolás Maduro, y la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), liderado por Henrique Capriles. En cuanto a la campaña presidencial de Maduro, se la consideraba injusta: se lo acusó de utilizar la imagen del difunto presidente Chávez como manipulación para obtener votos, hubo acusaciones sobre la ventaja que el control gubernamental sobre los medios de comunicación le otorgaron al oficialismo, había una pública animosidad entre los candidatos. El 14 de abril Maduro ganó las elecciones con el 50.61% de los votos. A pesar de tener la mayoría, fue la segunda elección presidencial más ajustada de la historia democrática de Venezuela.
La misma noche del 14 de abril Capriles llamó a un recuento del total de votos por supuestas irregularidades durante el proceso de votación. Ésta petición fue respaldada por múltiples gobiernos y figuras importantes. La solicitud fue presentada formalmente el 17 de abril y confirmaron la victoria de Nicolás Maduro. El 9 de septiembre del mismo año se presentó la misma petición ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La oposición continuó presentando recursos de impugnación, esta vez ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. Sostenían que, además de la ventaja otorgada por el control gubernamental sobre los medios, los centros de votación tenían un entorno intimidante gracias a los colectivos presentes asociados con el oficialismo, quienes intimidaban a los votantes. La Red de Observación Electoral de Asamblea de Educación (ROAE) respaldó las acusaciones con su observación sobre la gran cantidad de irregularidades encontradas durante el proceso electoral.
A partir del año 2014 se empezaron a ver las primeras de muchas protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro; los reclamos iban desde falta de bienes necesarios a crímenes, censura y violaciones de derechos humanos por parte del gobierno. Frente a las variadas crisis Venezuela se vio enfrentada al éxodo más grande de la historia reciente de América Latina, con 7,1 millones de venezolanos desplazados (hasta octubre de 2022) según la agencia para refugiados de la ONU (ACNUR). Actualmente se encuentra en su segunda presidencia, iniciada oficialmente el 10 de enero de 2019.
María del Pilar Capetta
Colaboradora de la Red Federal de Historia de las Relaciones Internacionales
Departamento de Historia
IRI – UNLP.