El 8 de marzo de 2025 se conmemora el Día Internacional de la Mujer y el tema propuesto por Naciones Unidas este año es: “Para las mujeres y niñas en TODA su diversidad: Derechos, igualdad y empoderamiento”.

La tématica representa un llamado a la acción para ampliar la igualdad de derechos, poder y oportunidades para todas, y un futuro feminista inclusivo. El énfasis está puesto en el empoderamiento de la próxima generación: la juventud, en especial las mujeres jóvenes, las niñas y adolescentes, quienes serán protagonistas de cambios duraderos.

Este 2025 es fundamental, pues se celebra el 30° aniversario de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing. Un plan visionario acordado por 189 gobiernos en 1995, con el propósito de alcanzar la igualdad de derechos de las mujeres y las niñas en toda su diversidad.

Recientemente, se publicó el informe del Secretario General de la ONU, António Guterres, titulado “Los derechos de las mujeres 30 años después de Beijing”. El documento consiste en el examen y evaluación de la aplicación de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, basado en evaluaciones mundiales, regionales y nacionales de 159 países, que sintetiza los progresos alcanzados y las prioridades de acción en el futuro.

Desde la Declaración hasta la fecha, ha habido grandes avances en materia de género. Por nombrar algunos, el informe señala que entre 1995 y 2024, se dictaron 1531 reformas legislativas que impulsaron la igualdad de género y que pretenden erradicar la violencia de género en todo el mundo. Asimismo, subraya que la proporción de mujeres en los parlamentos se ha duplicado desde 1995 y que las mujeres ocupan 1 de cada 4 escaños parlamentarios. Aunque también advierte que, en las condiciones actuales, la paridad de género en los parlamentos sigue siendo un sueño que podría no alcanzarse hasta 2063. En cuanto a la esfera digital, a nivel mundial, la proporción de mujeres que utilizan Internet aumentó del 50% al 65% entre 2019 y 2024.

Pese a todos estos avances señalados, en estos últimos años también se han registrado diferentes retrocesos en materia de género – en 2024 casi una cuarta parte de los gobiernos de todo el mundo informaron sobre ello-. Las consecuencias derivadas de la pandemia de COVID-19, las crisis económicas, los conflictos armados y la emergencia climática restringen de manera crónica los derechos y esperanzas de las mujeres y las niñas. Sumado a ello, el avance mundial de la derecha trae aparejado no solo un debate político fuertemente polarizado en materia de género; sino que un creciente retroceso a partir del menor financiamiento – incluso eliminación- de los programas y las instituciones que apoyan y protegen a las mujeres.

Por nombrar algunos datos poco alentadores, aumentó el número de mujeres que viven en contextos de conflicto y crisis. Incluso desde 2022, la violencia sexual relacionada con los conflictos ha aumentado un 50% -las mujeres y niñas son las más afectadas en el 95% de los casos-. Por lo tanto, la tasa de violencia de género, lejos de disminuir, aumenta en períodos de crisis y, a consecuencia de la tecnología digital, se han suscitado nuevas formas de violencia. En el aspecto laboral, las brechas de género en el empleo llevan décadas estancadas – el 63% de las mujeres de 25 a 54 años forma parte de la fuerza de trabajo, frente al 92% de los hombres-. Más aún, las mujeres siguen desempeñando el trabajo de cuidados no remunerado 2,5 veces más que los hombres.

También es necesario destacar que las mujeres y niñas continúan enfrentándose a barreras y riesgos mucho mayores, derivados de la discriminación de género, cuando se ven expuestas a otras formas de exclusión, como las que se basan en la discapacidad, la raza, la edad, los ingresos o la orientación sexual.

Entonces, es importante resaltar que la igualdad de género es un derecho humano fundamental. Y promover esa igualdad es esencial en todos los ámbitos de una sociedad, impacta favorablemente en la reducción de la pobreza, en la promoción de la salud, la educación, la protección y el bienestar de las niñas y los niños, entre otros.

En conclusión, en el marco del día internacional de la mujer y los 30 años de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, reafirmamos que es un año fundamental para las mujeres y niñas, pero también es un año de retrocesos y crisis sin precedentes. Por ello, desde el CeGRI, alentamos el ejercicio y cumplimiento de los derechos de las mujeres y personas LGBTQ+ para crear un mundo en el que todas las mujeres, niñas y disidencias disfruten de los mismos derechos y oportunidades. Para que las próximas generaciones puedan convivir en un mundo más igualitario y equitativo.

Jorgelina Ferraris
Rosana Riva
Integrantes
Centro de Estudios en Género(s) y Relaciones Internacionales
IRI-UNLP

Referencias

ONU Mujeres “Día Internacional de la Mujer 2025-Para las mujeres y niñas en TODA su diversidad: Derechos, igualdad y empoderamiento” (2024) https://www.unwomen.org/es/noticias/anuncio/2024/12/dia-internacional-de-la-mujer-2025-para-las-mujeres-y-ninas-en-toda-su-diversidad-derechos-igualdad-y-empoderamiento

ONU Mujeres (2024) “La ONU insta a una acción mundial inmediata para superar las importantes brechas de género” (2024) https://www.unwomen.org/es/noticias/comunicado-de-prensa/2024/09/la-onu-insta-a-una-accion-mundial-inmediata-para-superar-las-importantes-brechas-de-genero

ONU Mujeres “Los derechos de las mujeres 30 años después de Beijing” (2025) https://www.unwomen.org/es/digital-library/publications/2025/03/los-derechos-de-las-mujeres-30-anos-despues-de-beijing