Interior - Mediterráneo Occidental
6ª Conferencia Ministerial de los Ministros del Interior de los Países
del Mediterráneo
Declaración final
Lisboa, Portugal; 30 de junio de 2000
Bajo la presidencia de M. Fernando Gomes, ministro de la Administración interna de la República portuguesa, en Lisboa (Portugal) el 29 y 30 de junio de 2000, la 6° Conferencia de los ministros del Interior de los países del Mediterráneo occidental, con la participación de:
· M. Nourredine Yazid Zerhouni, ministro del Interior y de las colectividades locales de la República Democrática y Popular de Argelia;
· M. Jaime Mayor Oreja, ministro del Interior del Reino de España;
· M. Jean Pierre Chevenement, ministro del Interior de la República de Francia;
· M. Enzo Bianco, ministro del Interior de la República de Italia;
· M. Mohammed Aboulqassem Al Zwaï, secretario del Comité popular general y de justicia y de seguridad pública de la República Popular y Socialista Jamahiria Libia;
· M. Tonio Borg, ministro del Interior de Malta;
· M. Ahmed Midauoni, ministro del Interior del Reino de Marruecos;
· M. Abdallah Kallel, ministro del Interior de la República de Túnez.
Los ministros notan con satisfacción los progresos logrados luego de la conferencia de Argel y reconocen la importancia de los esfuerzos realizados y los trabajos efectuados en el curso del año transcurrido en el marco de la cooperación entre los servicios y organismos que se encuentran bajo su responsabilidad.
Experimentan profunda convicción de que el terrorismo, el crimen organizado y la inmigración ilegal constituyen desafíos que los países del Mediterráneo occidental no pueden soslayar y refuerzan la cooperación en su espacio común y la búsqueda de soluciones conjuntas.
Se felicitan de la participación de Malta y experimentan la esperanza de que la extensión de la conferencia contribuirá al refuerzo de sus líneas de cooperación.
Toman nota de las propuestas y conclusiones emitidas por las reuniones de expertos de alto nivel, programadas por el grupo de trabajo, sobre temas específicos y toman nota de la importancia de la designación efectiva y de la reciente puesta en marcha de puntos de contacto nacionales.
Los ministros han examinado el conjunto de cuestiones prioritarias inscritas en el orden del día de la Conferencia:
Los ministros convienen en profundizar y desarrollar todas las formas de cooperación y de intercambio de experiencias abarcando los aspectos de prevención y formación de expertos.
Los ministros insisten en reforzar la cooperación en materia de policía judicial por medio de procedimientos, de programas de acción y de calendarios de ejecución propuestos por los directores de policía judicial.
Los ministros acuerdan en la necesidad de proseguir la lucha contra el lavado de dinero, como figura en las conclusiones del seminario realizado sobre esta cuestión.
Esfuerzos suplementarios serán consagrados a la prevención y a la lucha contra la cyber-criminalidad, el tráfico ilícito de estupefacientes y de sustancias psicotrópicas, de armas, de municiones y explosivos, de tráfico humano, de falsa moneda, de objetos de arte y de piezas arqueológicas, así como el contrabando.
Conscientes de que el terrorismo constituye una amenaza para la estabilidad y la seguridad de los Estados y para la democracia como parte de los derechos del Hombre, del bienestar de las poblaciones y del logro de progreso económico y social, los ministros sostienen vigorosamente su compromiso de combatir todas las manifestaciones de terrorismo y a desmantelar sus recursos.
Reconociendo la importancia de la creación de puntos de contacto nacional (PCN), los ministros encargan al grupo de trabajo la puesta en marcha efectiva del intercambio de información a fin de garantizar la cooperación en este dominio.
Subrayan la necesidad de tomar las medidas apropiadas contra las actividades relacionadas con la violencia terrorista, quienes la financian y sostienen logísticamente, contra las conexiones existentes entre las organizaciones terroristas y con el crimen organizado, así como contra la utilización de nuevas tecnologías de información y de comunicación por los grupos terroristas.
Los ministros se felicitan por la conclusión de convenios internacionales y regionales contra el terrorismo.
Los ministros toman nota de la importancia de los intercambios humanos y de los flujos migratorios ente ambas orillas del Mediterráneo occidental. Reiteran la necesidad de una aproximación global a esta cuestión, incluyendo la promoción del desarrollo en los países o regiones de origen del tránsito.
Reafirman su determinación de acordar para combatir las fuentes de inmigración ilegal, tomado nota y concentrando sus esfuerzos en la detección y desmantelamiento de las redes criminales de tráfico humano y en perseguir a los empleadores de trabajadores clandestinos.
A estos efectos los ministros deciden reforzar la cooperación técnica entre los servicios de controles fronterizos.
Convienen en que las medidas de prevención y de lucha contra la inmigración ilegal no debe perturbar la circulación regular de las personas, que es un factor de enriquecimiento mutuo y de prosperidad compartida, etc., teniendo en cuenta las líneas seculares, culturales, sociales y económicas de unen a los pueblos del Mediterráneo occidental.
Por medio de sus recomendaciones, los ministros recomiendan al grupo de trabajo la necesidad de lograr y profundizar la reflexión sobre las medidas para facilitar la circulación de personas mediante el mejoramiento y simplificación de los procedimientos de expedición de visas y la aplicación de acuerdos y convenios de readmisión.
Profundamente comprometidos a favor de un modelo social fundado en la tolerancia, el respeto mutuo y la integración armónica de las diversas comunidades, los ministros subrayan su determinación de combatir el racismo y la xenofobia y a luchar contra todas las formas de discriminación.
Los ministros toman nota de las medidas propuestas por los representantes de las instituciones de protección civil de los países del Mediterráneo occidental en su reunión en Argel del 27 y 28 de marzo de 2000, donde las más significativas se referían al mejoramiento de la cooperación y a la asistencia científica y técnica, para reducir los riesgos naturales y tecnológicos y reforzar la protección de las personas, del medio ambiente y de los bienes en caso, principalmente, de inundación, de sismos, de incendio de bosques, de contaminación marina accidental y de otros accidentes o catástrofes mayores.
Los ministros preconizan y animan a la realización de ejercicios periódicos organizados por los servicios nacionales de protección civil, a fin de armonizar los métodos de intervención en la región del Mediterráneo occidental.
Consideran de interés el proyecto piloto euromediterráneo de gestión de catástrofes naturales.
Los ministros recomiendan al grupo de trabajo profundizar la reflexión y programar una reunión ad hoc para impulsar la cooperación en el dominio de las colectividades locales.
Tomado nota de la etapa cualtitativa de la conferencia de Lisboa, los ministros encargan al grupo de trabajo continuar la reflexión sobre los medios que permitirán la puesta en marcha de las acciones definidas en esta declaración y las modalidades apropiadas para asegurar el trabajo de la Conferencia.
Los ministros expresan su reconocimiento a las autoridades portuguesas por la atención y hospitalidad que les ha reservado y por la perfecta organización que ha permitido el éxito de esta conferencia.
Por último, aceptan con placer la invitación de su homólogo del Reino de España a continuar en su país los trabajos para la 7° Conferencia ministerial.