Osaka, Japón (19 de noviembre de 1995)
1. Nos hemos reunido
en Osaka a fin de profundizar aún más el dinamismo económico y el sentido de
comunidad del Asia-Pacífico. El Asia-Pacífico está experimentando el más
extraordinario crecimiento económico y una interdependencia cada vez más
creciente. Es un contribuyente significativo a la prosperidad y la estabilidad
mundial.
Creemos que nuestras reformas económicas basadas en los mecanismos de
mercado han desatado la creatividad y energía de nuestros pueblos y mejorado la
prosperidad y el nivel de vida de nuestros ciudadanos en la región y en el
mundo en general. APEC nos presenta una oportunidad de oro para el siglo XXI. A
través de APEC podemos controlar, coordinar y canalizar las dinámicas
tendencias económicas hacia nuestra ventaja colectiva.
2. En Blake Island
hemos instalado la visión de una comunidad de economías del Asia-Pacífico, y en
Bogor hemos establecido un número de metas y objetivos específicos, incluyendo:
comercio e inversión libres y abiertos en el Asia-Pacífico no más tarde que el
año 2010 en el caso de las economías industrializadas y 2020 en el caso de
economías en desarrollo, expansión y aceleración de los programas de
facilitación del comercio y la inversión, y cooperación para el desarrollo
intensificada para obtener crecimiento sustentable, desarrollo equitativo y
estabilidad nacional.
Hemos, en Osaka, entrado en la fase de acción al trasladar esta visión y
estas metas a la realidad. Hoy adoptamos la Agenda de Acción de Osaka, la
encarnación de nuestra voluntad política de ejecutar nuestro compromiso de
Bogor. Implementaremos la Agenda de Acción con firme determinación.
3. La Agenda de Acción
de Osaka es el patrón para el futuro trabajo de APEC hacia nuestras metas
comunes. Representa los tres pilares de liberalización del comercio y la
inversión, su facilitación, y la cooperación económica y técnica. Lograr un
desarrollo económico sostenido a lo largo de la región de APEC depende de la
vigorosa instrumentación de acciones en estas áreas.
Reflejando el carácter diverso de APEC y el amplio alcance de nuestras
actividades, alcanzaremos la meta de largo plazo de comercio e inversión libres
y abiertos de diversas maneras:
Alentaremos y concertaremos los actuales esfuerzos de liberalización
voluntaria en la región, tomaremos acciones colectivas para avanzar en nuestros
objetivos de liberalización y facilitación, y estimularemos y contribuiremos a
profundizar el "momentum" para la liberalización global.
4. Enfatizamos nuestra
resuelta oposición a un bloque comercial orientado hacia adentro que se desvíe
de la búsqueda del libre comercio mundial, y nos comprometemos a mantener
firmemente una cooperación regional abierta. Reafirmamos nuestra determinación de
ver a APEC tomar la iniciativa en el fortalecimiento de un sistema multilateral
de comercio abierto. Confiamos en que una mayor participación de las economías
de APEC en la OMC facilitaría una más grande cooperación regional. Exploraremos
iniciativas comunes bajo la OMC, incluyendo los preparativos para la Reunión
Ministerial de Singapur. Asegurando que APEC permanezca consistente con el
Acuerdo de la OMC, lograremos la liberalización del comercio y la inversión
constante y progresivamente.
Deseando que las tensiones comerciales y económicas entre las economías
de APEC se resuelvan de una manera no confrontativa, nos encontramos abocados a
encontrar vías de reducir las fricciones comerciales. Acordamos lo deseable que
resulta un servicio de mediación de disputas de APEC, compatible con los
derechos y obligaciones previstos en el Acuerdo de la OMC y en otros acuerdos
internacionales.
5. En la Agenda de
Acción, hemos acordado establecer un conjunto de principios fundamentales para
guiar la búsqueda de nuestra liberalización y facilitación: comprensibilidad;
consistencia con la OMC; comparabilidad; no discriminación; transparencia;
estabilidad, comienzo simultáneo, proceso continuo y cronogramas
diferenciados; flexibilidad; y cooperación. Instruimos a nuestros ministros y
funcionarios a empezar inmediatamente la preparación de Planes de Acción
concretos y sustantivos a ser presentados para su evaluación en la Reunión
Ministerial de Filipinas en 1996. La implementación completa de los Planes de
Acción comenzará en enero de 1997 y será revisada anualmente.
Para ayudar en este proceso, instruimos a nuestros ministros y
funcionarios a consultarse en un esfuerzo colectivo de fomento de la confianza
a fin de facilitar los intercambios de información, para asegurar transparencia,
y para contribuir a alcanzar la comparabilidad de los respectivos Planes de
Acción.
La Agenda de Acción podrá ser revisada y mejorada como sea necesario en
respuesta a circunstancias cambiantes. Si bien hemos elegido la postura única
de liberalización concertada basada en el voluntarismo e iniciativas colectivas
por parte de las economías miembro como los medios fundamentales para
implementar la Agenda de Acción, su éxito depende de nuestro continuo esfuerzo,
firme auto-disciplina, y consulta permanente.
6. Guiados por los
principios contenidos en la Agenda de Acción de Osaka de igualdad y respeto
mutuo, beneficio y asistencia recíproca, asociación genuina y constructiva, y
fomento del consenso, promoveremos la cooperación económica y técnica orientada
a la acción en una amplia esfera de áreas. Con la Agenda de Acción, APEC ha
ganado un renovado "momentum" y una más amplia perspectiva para la
cooperación económica y técnica.
La cooperación económica y técnica implementada a través de varios
medios incluyendo la iniciativa Socios para el Progreso (Partners for
Progress), sirve para promover la liberalización y facilitación del comercio y
las inversiones, restringir las disparidades dentro de la región, y alcanzar
crecimiento y prosperidad para la región en su conjunto. Trabajaremos entonces
a través de diálogos de política y actividades comunes a fin de ampliar y
profundizar la cooperación intra-regional en todas las áreas de nuestro
interés.
A nivel ministerial, se han realizado valiosas consultas sobre aspectos
macroeconómicos, financieros, tipos de cambio y otras políticas relativas a los
flujos de capital, desarrollo de mercado de capitales, y financiamiento de
infraestructura. Valoramos asimismo la valiosa contribución en el nivel ministerial
en campos tales como la industria de telecomunicaciones e información,
transporte, PyME, y ciencia y tecnología. Esperamos que continuarán sus
positivos esfuerzos.
7. Nos complace
anunciar que cada uno de nosotros ha traído un paquete de acciones iniciales
demostrando nuestro firme compromiso de alcanzar la liberalización y
facilitación. También representa la primera iniciativa de amplio alcance para
acelerar la implementación de nuestros compromisos de la Ronda Uruguay y para
profundizar sus resultados a través, por ejemplo, de la aceleración en las
reducciones arancelarias, la rápida implementación de los acuerdos de la OMC, y
la prosecución de la desregulación.
Junto con estas medidas, nuestras acciones colectivas incluyendo la
armonización y el mejoramiento de la eficiencia de los procedimientos aduaneros
y la promoción del reconocimiento mutuo y el mejoramiento de los mecanismo para
evaluación de la correspondencia de esfuerzos, redundará en beneficios
inmediatos y tangibles para los negocios. Instamos a las economías que no son
miembros de APEC a hacer lo mismo y ayudar a la liberalización mundial del
comercio y la inversión.
8. El Grupo de
Personas Eminentes y el Foro de Negocios del Pacífico han realizado importantes
contribuciones a la formulación de la Agenda de Acción de Osaka. Apreciando
altamente la dedicación y la sabiduría de las personas que tomaron parte en
este proceso, los felicitamos por la exitosa conclusión de sus tareas.
Reconociendo que los negocios son la fuente de vitalidad para el
Asia-Pacífico y la fuerza motora para el desarrollo económico regional,
designaremos a los miembros del Consejo Asesor de Negocios de APEC para que
provean su visión y consejos para nuestras actividades de APEC.
9. Nuestro ambicioso
intento de promover una cooperación regional de amplio alcance y promover el
sentimiento de comunidad en el Asia-Pacífico encontrará, sin dudas, numerosos
nuevos desafíos y asumirá nuevas responsabilidades a pesar de, o quizás
precisamente por, nuestro crecimiento económico. Se prevé que la creciente
población y el rápido crecimiento económico de la región del Asia-Pacífico
aumenten repentinamente la demanda de alimentos y energía así como las
presiones sobre el medio ambiente. Hemos coincidido en la necesidad de poner estos
temas interrelacionados y amplios en nuestra agenda de largo plazo y de
consultarnos aún más sobre la manera de iniciar acciones conjuntas a fin de
asegurar que la prosperidad económica de la región es sustentable.
A través de nuestras acciones, afirmamos la vital importancia de
extender y profundizar los intereses comunes que son la base de APEC y de
forjar relaciones de confianza entre nuestros pueblos. Nos comprometemos a
avanzar juntos para enfrentar los desafíos futuros.