Anuario de Relaciones Internacionales, Año 1997 DOCUMENTOS

 

ORGANIZACION DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACION (FAO)
Cuarta Conferencia Técnica Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos

Declaración de Leipzig sobre la Conservación y la Utilización Sostenible de los Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura

 

(Leipzig, Alemania, el día 23 de junio de 1996)

1. Reconociendo la importancia fundamental de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura, en particular para la seguridad alimentaria de las generaciones presentes y futuras, los representantes de 150 Estados y 54 organizaciones nos hemos reunido en Leipzig, por invitación de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, en la Cuarta Conferencia Técnica Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos. La finalidad es afirmar y renovar nuestro compromiso para la conservación y la utilización sostenible de estos recursos y la distribución justa y equitativa de los beneficios derivados de la utilización de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura, reconociendo la conveniencia de compartir equitativamente los beneficios que se derivan de la utilización de los conocimientos tradicionales, las innovaciones y las prácticas pertinentes para la conservación de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura y su utilización sostenible. Estamos convencidos de que estos esfuerzos pueden ser una contribución esencial para alcanzar los objetivos y facilitar la aplicación del Convenio sobre la Diversidad Biológica y el Programa 21.

2. Reconociendo que los Estados tienen derechos soberanos sobre sus recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura, confirmamos también nuestra responsabilidad común e individual con respecto a estos recursos.

3. Estos recursos constituyen la base de la evolución natural y dirigida de las especies vegetales más imprescindibles para la supervivencia y el bienestar de las personas. Todos los países necesitan recursos fitogenéticos si quieren aumentar el suministro de alimentos y la producción agrícola de manera sostenible y hacer frente a los desafíos correspondientes que plantean los cambios del medio ambiente, incluidos los cambios climáticos. Somos conscientes del valor intrínseco de esta diversidad biológica y de su importancia ecológica, social, económica, científica, educativa, cultural y estética.

4. Los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura son el producto de la evolución natural y de la intervención humana. Reconocemos la función desempeñada por generaciones de campesinos y campesinas y de fitomejoradores, así como por las comunidades indígenas y locales, en la conservación y el mejoramiento de los recursos fitogenéticos. Gracias a sus esfuerzos, se ha conseguido mucho, y se sigue todavía consiguiendo, en la recolección, la conservación, la mejora y la utilización sostenible de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura.

5. Somos conscientes, sin embargo, de las graves amenazas que se ciernen sobre la seguridad de los recursos fitogenéticos y reconocemos que los esfuerzos para la conservación, el fomento y la utilización sostenible de la diversidad genética se deben mejorar. Esta diversidad se está perdiendo en los campos y en otros ecosistemas prácticamente de todos los países, e incluso en los bancos de germoplasma. Aunque el número de bancos de germoplasma ha aumentado con rapidez en los últimos decenios, muchos no se ajustan a unas normas internacionales mínimas. Hay un número alarmantemente elevado de muestras almacenadas que necesitan regeneración, lo cual indica que una gran parte del material recolectado y conservado en el pasado está ahora en peligro.

6. Existen lagunas y deficiencias importantes en la capacidad nacional e internacional para conservar, caracterizar, evaluar y utilizar de manera sostenible los recursos fitogenéticos con el fin de aumentar la seguridad alimentaria mundial y contribuir a un desarrollo sostenible. La conexión, que es fundamental, entre la conservación y la utilización debería mejorarse. No se utiliza en toda la medida posible la diversidad existente en las especies cultivadas para aumentar la producción de alimentos y mejorar la sostenibilidad de los sistemas de producción. Hay que revisar la capacidad institucional, las estructuras y los programas para hacer frente a esas deficiencias. Es necesario aumentar la capacidad nacional, sobre todo en los países en desarrollo.

7. Reconocemos la interdependencia de los países y las poblaciones con respecto a los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura. El acceso a los recursos genéticos y las tecnologías y la participación en ellos son imprescindibles para conseguir la seguridad alimentaria mundial y satisfacer las necesidades de una población mundial en aumento, por lo que se deben favorecer tal acceso a las tecnologías y su reparto con los países en desarrollo, deberá proporcionarse y/o facilitarse en las condiciones más justas y favorables posibles, incluidas las preferenciales y de favor, tal como hayan sido mutuamente acordadas por todas las partes de la transacción el caso de la tecnología objeto de patentes y de otros derechos de propiedad intelectual. Al acceso a la tecnología y su transferencia deberá proporcionarse en condiciones que reconozcan la protección apropiada y efectiva de los derechos de propiedad intelectual y se adecuen a los mismos.

8. En particular, reconocemos la necesidad imperiosa de mantener las colecciones ex situ y los hábitats in situ existentes de recursos fitogenéticos. Es importante que esta diversidad adquiera más utilidad y valor para los mejoradores, los agricultores y las comunidades indígenas y locales, proporcionando una documentación de mayor calidad y más accesible. Reconocemos la necesidad de apoyo y de incentivos sustanciales a largo plazo para los programas nacionales e internacionales de fitomejoramiento en particular con iniciativas para adaptar y mejorar el material genético vistas a su ulterior aprovechamiento por parte de los fitomejoradores. Hacemos un llamamiento en pro de una asociación nueva y más productiva entre los científicos y los agricultores para aprovechar los esfuerzos que están realizando los segundos en la ordenación y la mejora de sus recursos fitogenéticos, especialmente en las zonas marginales.

9. Nuestro objetivo primordial debe ser aumentar la seguridad alimentaria mundial mediante la conservación y la utilización sostenible de los recursos fitogenéticos. Esto exigirá la aplicación de enfoques integrados que combinen lo mejor de los conocimientos tradicionales y de las tecnologías modernas. Es preciso encontrar medios para determinar, aumentar y compartir de forma justa y equitativa los beneficios derivados de la conservación y la utilización sostenible de los recursos fitogenéticos.

10. En la Cuarta Conferencia Técnica Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos, a fin de contribuir a alcanzar nuestros objetivos, hemos aprobado un Plan de acción mundial para la conservación y la utilización sostenible de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura. Este Plan proporciona un marco coherente para las actividades relacionadas con la conservación in situ y ex situ y la utilización sostenible de los recursos fitogenéticos, así como la creación de instituciones y de capacidad. Contribuirá a facilitar la sinergia entre las actividades en curso y una utilización más eficaz de los recursos disponibles. Estamos convencidos de la extraordinaria importancia de los compromisos nacionales a largo plazo para la integración de los programas y planes nacionales y para la indispensable cooperación nacional, regional e internacional.

11. Este Plan de acción mundial es un elemento importante del Sistema mundial de la FAO para la conservación y utilización de los recursos fitogenéticos. El Sistema mundial comprende en la actualidad, entre otros elementos, un Compromiso Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos, ahora en fase de revisión. Creemos que es importante completar la revisión del Compromiso Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos y ajustar el Sistema mundial de acuerdo con el Convenio sobre la Diversidad Biológica.

12. Nos comprometemos a respetar nuestros compromisos adoptando las medidas necesarias para aplicar el Plan de acción mundial, de acuerdo con nuestras capacidades nacionales.

13. Nos hemos reunido en Leipzig, conscientes de nuestras responsabilidades y de las dificultades que se plantean, pero con la confianza de que se puede y debe progresar. Insistimos en la necesidad de integrar la conservación y la utilización sostenible de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura en las políticas agrícolas como elemento esencial de la seguridad alimentaria. Invitamos a que se preste atención al Plan de acción mundial en la próxima Cumbre Mundial sobre la Alimentación, que se celebrará en noviembre de 1996. Invitamos a todos a que se unan a nosotros en esta causa común.