OTAN
(Berlín, 3 de junio de 1996)
1. Nos
hemos reunido hoy en Berlín, capital de una Alemania unida y testigo, durante
más de cuatro décadas, del éxito de la política de la Alianza y de la cohesión
transatlántica. La unificación de la ciudad constituye hoy un símbolo de la
nueva era de partenariato y cooperación.
2. En esta
reunión de Berlín hemos logrado un importante avance en la constitución de la
nueva Alianza, que asume misiones nuevas como la de la IFOR. Hemos tomado hoy
decisiones que apuntan a avanzar más en la adaptación de las estructuras de la
Alianza, de manera que ésta pueda cumplir con más eficacia toda la gama de sus
misiones y sobre la base de un partenariato transatlántico sólido, construir
una identidad europea de seguridad y defensa en el seno de la Alianza,
continuar el proceso de apertura de la Alianza a nuevos miembros y desarrollar
aún más sólidos lazos de cooperación con los países partenaires para reforzar
nuestras firmes relaciones con Ucrania y establecer un partenariato sólido,
estable y duradero con Rusia.
3. Esta
nueva Alianza es hoy parte integrante de la estructura de seguridad europea
cooperativa, que se está gestando. Estamos presentes en Bosnia-Herzegovina, con
una cantidad importante de nuevos partenaires y otros países para contribuir
con la acción de la Fuerza de ejecución (IFOR) para terminar con la guerra y el
conflicto en ese país y ayudar a restablecer la paz en la región. Este
emprendimiento común, la operación militar más importante de la historia de la
Alianza, muestra cómo debería establecerse nuestra futura cooperación en
materia de seguridad en toda la zona euroatlántica.
4. Hoy
hemos dado un nuevo impulso al proceso de adaptación y de reforma de la
Alianza, iniciado en 1990 en la Reunión Cumbre de Londres y que continuó en la
Reunión Cumbre de Bruselas de 1994. Teniendo en cuenta los cambios radicales
que se produjeron en el escenario de seguridad en Europa a medida que se iban
arraigando nuevas democracias, y luego de la adopción en 1991 de nuestro nuevo
concepto estratégico, hemos reorganizado y racionalizado nuestras estructuras y
procedimientos políticos y militares, reducido sensiblemente nuestras fuerzas y
reconfigurado nuestras fuerzas de modo de mejorarlas para cumplir más
eficazmente las nuevas misiones de gestión de crisis, preservando al mismo
tiempo la capacidad de defensa colectiva. Además, hemos realizado actividades
de apertura cada vez más variadas con nuestros partenaires.
Queremos
lograr una mejor adaptación de la Alianza para que pueda cumplir con su
objetivo principal: asegurar la paz y la seguridad en la zona euroatlántica.
5. Se ha
hecho mucho, pero ha llegado el momento de dar un paso decisivo para que la
Alianza sea cada vez más flexible y eficaz de manera que pueda enfrentar nuevos
desafíos. Por consiguiente, estamos dispuestos a:
- adaptar las estructuras de la Alianza. Una parte esencial de esta
adaptación consiste en construir, en el seno de la OTAN, una identidad europea
de seguridad y de defensa que permita a todos los Aliados europeos prestar una
contribución más coherente y eficaz a las misiones y actividades de la Alianza
como expresión de nuestras responsabilidades compartidas, de actuar por sí
mismos según las necesidades para reforzar el partenariato transatlántico.
- desarrollar aún más nuestra aptitud para cumplir nuevos roles y nuevas
misiones en lo que respecta a la prevención de los conflictos y a la gestión de
crisis y continuar los esfuerzos de la Alianza contra la proliferación de las
armas de destrucción masiva y de sus vectores, manteniendo de todos modos
nuestra capacidad de defensa colectiva.
- acrecentar nuestra contribución a la seguridad y a la estabilidad de
toda la zona euroatlántica enriqueciendo y profundizando nuestro diálogo y
nuestra cooperación con los partenaires, en particular a través del PFP y del
Consejo de Cooperación Nordatlántico (CCNA), desarrollaremos también, nuestras
importantes relaciones con Rusia y Ucrania, seguiremos dispuestos a recibir
nuevos miembros en el marco del proceso de ampliación ya iniciado y
reforzaremos nuestros lazos con otras organizaciones que contribuyen a la
seguridad europea.
6. Hoy, vemos con agrado los progresos cumplidos en la adaptación
interna de nuestra Alianza, sobre la base de las decisiones de la Cumbre de
Bruselas de 1994. Señalamos especialmente al respecto:
- la actualización del concepto de los GFIM. Al permitir un despliegue
de fuerzas más flexible y más móvil para el cumplimiento de nuevas misiones,
éste concepto facilitará la organización de operaciones de la OTAN de acuerdo a
las circunstancias, la utilización de capacidades militares separables pero no
separadas en operaciones dirigidas por la UEO, y la participación de países
exteriores a la Alianza en operaciones como la de la IFOR. Solicitamos ahora
que el Comité militar haga llegar sus recomendaciones al Consejo con respecto a
la implementación de este concepto con la aprobación de todos los Aliados
teniendo en cuenta los trabajos en curso en pos de la adaptación de las
estructuras y procedimientos militares.
- la constitución del Grupo de Coordinación de las Orientaciones (PCG),
que responderá a la necesidad que se plantea en el marco de las nuevas misiones
de la OTAN de una coordinación más estrecha de los puntos de vista políticos y
militares.
- la llegada de los primeros resultados del estudio a largo plazo del
Comité militar, que finalizará con recomendaciones para la constitución de una
estructura de comando militar más adecuada a las necesidades de la seguridad
actual y futura de la zona euroatlántica.
- la realización de los programas de trabajo iniciales del Grupo
político militar de alto nivel sobre la proliferación (SGP) y del Grupo defensa
de alto nivel sobre la proliferación (DGP), encargados de evaluar el riesgo
para la seguridad común que representa la proliferación;
- la reunión que realizará durante el corriente mes el Consejo del
Atlántico Norte (ministros de Defensa) en la que participarán la totalidad de
los dieciséis países miembros.
7. Nuestros esfuerzos de adaptación en pos del mejoramiento de la
capacidad de la Alianza para cumplir sus roles y misiones con la participación
de todos los Aliados, están orientados hacia tres objetivos fundamentales.
El primer objetivo consiste en garantizar la eficacia militar de la
Alianza de modo de permitirle, en el escenario de seguridad cambiante con el
que se enfrenta Europa, cumplir su misión tradicional de defensa colectiva y
asumir nuevos roles en las circunstancias cambiantes sobre las siguientes
bases:
- la existencia de una estructura renovada de comando multinacional
único que refleja la situación estratégica en Europa, permite una plena
participación de todos los Aliados y es capaz de emprender todas las misiones
gracias a procedimientos que se definen en cada caso según las decisiones del
Consejo;
- estructuras de QG más fácilmente desplegables y fuerzas más móviles,
que pueden apoyarse entre sí durante largos períodos;
- la posibilidad de prever una mayor participación de los países
partenaires e integrar nuevos miembros en la estructura militar de la Alianza;
- la posibilidad de montar operaciones de la OTAN que no estén
contempladas en el Artículo 5, según el concepto de un sistema único capaz de
hacer frente a funciones múltiples. Seguiremos generando acuerdos flexibles
para emprender una amplia gama de misiones, respetando siempre las decisiones
de los países en materia de la participación en cada una de las operaciones,
sobre la base de los acuerdos existentes en la OTAN. Estas operaciones podrán
ser diferentes en cuanto a las contribuciones de los Aliados y en función de
las decisiones del Consejo que deberán tomarse caso por caso, sobre ciertos
aspectos del comando y del control militares. El concepto de los GFIM ocupa un
lugar predominante en el criterio que adoptamos para reunir las fuerzas que
deben participar en operaciones circunstanciales y para organizar su comando en
el seno de la Alianza. De acuerdo al objetivo de construir la identidad europea
de seguridad y de defensa en el seno de la OTAN, estas disposiciones deberían
permitir a todos los Aliados europeos asumir un mayor grado de participación en
las estructuras militares y en las estructuras de comando de la OTAN así como
también, si fuera necesario, en las operaciones circunstanciales a las que deba
hacer frente la Alianza;
- el aumento de la cooperación político-militar, en particular a través
del PCG y el ejercicio efectivo del control político por parte del Consejo de
la OTAN a través del Comité militar;
- el imperativo de rentabilidad.
El segundo
objetivo consiste en preservar la vinculación transatlántica, sobre las
siguientes bases:
- el mantenimiento de la Alianza como foro esencial de consulta entre
sus miembros y como recinto en el que ellos acuerdan políticas relacionadas con
sus compromisos de seguridad y defensa como el Tratado de Washington;
- la continuación del desarrollo de un partenariato sólido entre Aliados
norteamericanos y europeos, tanto en el plano político como en el militar y el
mantenimiento del compromiso de los Aliados norteamericanos en el conjunto de
la estructura de comando y de fuerzas;
- la disposición de cumplir, si fuera posible, objetivos comunes en
materia de seguridad en el marco de la Alianza;
- una total transparencia entre la OTAN y la UEO en la gestión de
crisis, según las necesidades, gracias a consultas conjuntas sobre la manera de
responder a diversas eventualidades.
El tercer objetivo consiste en desarrollar la identidad europea de
seguridad y defensa en el seno de la Alianza. Gracias a la definición realizada
del aprobada del concepto de GFIM, esta identidad se basará en sanos principios
militares y se apoyará en una planificación militar adecuada, permitiendo, así,
la creación de fuerzas militarmente coherentes y eficaces, capaces de operar
bajo el control político y la dirección estratégica de la UEO.
Como elemento esencial del desarrollo de esta identidad, prepararemos,
asociando a la OTAN y a la UEO en este esfuerzo, operaciones dirigidas por la
UEO (la planificación y la conducción de ejercicios para los elementos de
comando de las fuerzas). Una preparación de este tipo en el seno de la Alianza
debería tener en cuenta la participación en las disposiciones de comando
europeo, de todos los Aliados europeos que elijan hacerlo. Nos basaremos en:
- la identificación, en el seno de la Alianza, de los tipos de
capacidades, medios y medios de apoyo separables pero no separados y -para
preparar operaciones dirigidas por la UEO- QG, elementos de QG y funciones de
comando separables pero no separadas necesarias para comandar y conducir
operaciones dirigidas por la UEO y que podrían estar disponibles, en base a una
decisión del Consejo de la OTAN;
- la elaboración de disposiciones de comando europeo multinacional
adecuadas en el seno de la OTAN, coherentes con el concepto de GFIM, que las
hacen posibles, permitiendo asegurar la preparación, el apoyo, el comando y la
conducción de las operaciones dirigidas por la UEO. Esto implica otorgar un
"doble casco" al personal adecuado en la estructura de comando de la
OTAN, para que pueda cumplir satisfactoriamente sus funciones. Estas
disposiciones de comando europeo deberían poder ser identificadas y
adecuadamente estructuradas para que una fuerza operacional militar coherente y
eficaz se constituya rápidamente.
Además, la Alianza apoyará el desarrollo de la IESD en el seno de la
OTAN a través de una planificación militar y de ejercicios para misiones de la
UEO ilustrativas identificadas por la UEO, a pedido de ésta, y en coordinación
con la OTAN. Sobre la base de orientaciones políticas generadas por el Consejo
de la UEO y el Consejo de la OTAN, este trabajo de planificación abarcaría como
mínimo:
- la preparación de las informaciones pertinentes con respecto a los objetivos,
el alcance y la participación en misiones ilustrativas de la UEO;
- la identificación de las necesidades de planificación y de ejercicios
en relación a los elementos de comando y a las fuerzas para operaciones
ilustrativas dirigidas por la UEO;
- el establecimiento de planes adecuados para ser presentados a través
del Comité militar y del Consejo de la OTAN para su evaluación y aprobación.
La OTAN y la UEO deberían acordar las modalidades de aplicación de estos
planes. El Consejo de la OTAN aprobará la disponibilidad de medios y
capacidades de la OTAN para operaciones dirigidas por la UEO, se mantendrá
informado del uso que de ellos se haga a través de un seguimiento en el marco
de las orientaciones dadas por las autoridades militares de la OTAN y a través
de consultas periódicas con el Consejo de la UEO, evaluando permanentemente su
uso.
8. Sobre la base de los lineamientos aprobados hoy hemos solicitado que
el Consejo en sesión permanente, siguiendo la opinión de las autoridades
militares de la OTAN:
- establezca orientaciones y precise propuestas específicas para
continuar la adaptación de las estructuras y procedimientos de la Alianza;
- elabore, en lo que concierne a la identidad europea de seguridad y de
defensa en el seno de la Alianza, medidas y acuerdos adecuados para la
aplicación de las disposiciones del párrafo 7. Entre los acuerdos que requieren
una revisión detallada, algunos se refieren a la identificación y a la
disponibilidad, para su utilización por parte de la UEO, de capacidades,
medios, QC y elementos de QG de la OTAN para misiones que deba cumplir la UEO,
a cualquier anexo que requieran los acuerdos existentes en lo que hace a la
participación en la información para la conducción de operaciones de la UEO y a
la manera en que dichas consultas se realizarán con el Consejo del Cooperación
Nordatlántico sobre la utilización de medios y de capacidades de la OTAN,
incluso sobre el seguimiento de la utilización de estos medios por parte de la
OTAN;
- y que nos presente en nuestra reunión de diciembre sus recomendaciones
para las decisiones a tomar.
9. En este contexto, hemos encargado al Consejo en sesión permanente la
evaluación de los trabajos en curso sobre la estructura del comando militar de
la OTAN y la presentación de un informe con sus recomendaciones, en nuestra
próxima reunión.
10. El segundo aspecto de la adaptación de la Alianza consiste en
desarrollar nuestra aptitud para cumplir nuevos roles y misiones como la
operación "Esfuerzo concertado". La fuerza de ejecución (IFOR) dirigida
por la OTAN se dedica con éxito a la implementación de los aspectos militares
del acuerdo de paz en Bosnia-Herzegovina, acuerdo de importancia histórica para
el establecimiento de la paz, de la seguridad y de la reconciliación en la
región. La operación de la IFOR reunió a la OTAN y a dieciséis países no
miembros de Europa, África del Norte, el Cercano Oriente y Asia en el marco de
una coalición unificada y eficaz al servicio de la paz. Entre ellos, figuran
doce partenaires del CCNA y del PFP, lo que subraya nuestro compromiso común
con nuevas formas de seguridad cooperativa en Europa. La contribución de Rusia
acentúa al mismo tiempo la aptitud de la Alianza para la creación de nuevos
"partenariatos" prácticos y el rol esencial de este país en el nuevo
escenario de seguridad internacional.
En los seis meses transcurridos desde su despliegue, la IFOR contribuyó
a que el pueblo de Bosnia-Herzegovina crea nuevamente en la paz. Un escenario
seguro se está gestando. Las fuerzas, antiguas facciones en guerra, han sido
separadas y se están desmovilizando y se dirigen hacia sus acantonamientos. La
IFOR no tolerará ninguna amenaza a la paz ni ningún obstáculo para la libertad
de circulación. Continuará cumpliendo su mandato de una manera imparcial y
equitativa.
La IFOR presta un apoyo cada vez mayor a la implementación de los
aspectos civiles del acuerdo de paz en el marco de su mandato existente,
siempre que esto no le impida cumplir su misión principal, la militar. El éxito
de la misión civil es indispensable para el establecimiento de una paz duradera
y para la rehabilitación, en particular por la reconstrucción económica y
social, la celebración de elecciones libres y equitativas, el retorno de los
refugiados y personas desplazadas y el mantenimiento del orden público. La
detención de criminales de guerra y las investigaciones sobre los crímenes de
guerra son esenciales para la instauración de la justicia y de una paz duradera
en Bosnia-Herzegovina.
Subrayamos la importancia del trabajo del Alto representante y
continuamos apoyándolo en su difícil tarea de coordinación. Estamos muy
satisfechos de la eficaz cooperación de la IFOR con la Oficina del Alto
representante. La IFOR colabora también activamente con otras organizaciones
civiles, especialmente el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los
refugiados, en la planificación del regreso de los refugiados y de las personas
desplazadas; los trabajos del Tribunal Penal Internacional para la
ex-Yugoslavia (PPI), en las investigaciones sobre los crímenes de guerra y en
la presentación ante la justicia de los criminales de guerra, con la fuerza
internacional de policía, en su tarea de restablecimiento del orden público;
con el Comité Internacional de la Cruz Roja en lo que respecta a cuestiones
humanitarias; con la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa
(OSCE), con respecto a sus responsabilidades en la preparación y la conducción
de las elecciones y en medidas de confianza y control de armamentos. En este
contexto invitamos a las Partes a firmar un acuerdo de control de armamentos a
nivel subregional antes del 11 de junio, tal como está establecido en el
acuerdo de paz.
Se ha puesto fin a la guerra en Bosnia-Herzegovina, pero la paz sigue
siendo frágil. Hasta septiembre será un período crucial para la preparación de
las elecciones en Bosnia-Herzegovina, hito importante en el camino hacia la
democracia y la reconstrucción. Dado lo vasto y lo complejo de esta tarea, la
IFOR mantendrá aproximadamente el actual nivel de sus fuerzas hasta después de las
elecciones, que deberán realizarse a más tardar en septiembre, según lo
establecido en el acuerdo de paz y conservará su capacidad global hasta
diciembre, fecha en la que expirará su mandato.
La IFOR está dispuesta a dar, tal como se ha establecido, un apoyo de
urgencia a la ATNUSO en Eslavonia oriental hasta el establecimiento de la paz.
Señalamos con satisfacción el profesionalismo, el sentido del deber y el
coraje que han demostrado los participantes en la IFOR, colectiva e
individualmente, expresamos también nuestra profunda solidaridad con las
familias de los que han ofrecido su vida y/o han resultado heridos por causa de
la paz.
La OTAN contribuyó a generar una visión de la paz fundada en los
esfuerzos cooperativos, incluso entre antiguos adversarios. Todos nuestros
países se han comprometido, directamente o a través de una cooperación
internacional, a crear las condiciones para instaurar una paz duradera y la
reconstrucción, sobre la base de la confianza recíproca, la justicia, la
reconciliación y la estabilidad militar. La comunidad internacional puede
aportar ideas y asistencia, pero el pueblo y los dirigentes de
Bosnia-Herzegovina y de la región deben asumir sus propias responsabilidades en
la construcción de la paz. Convocamos a las Partes a redoblar sus esfuerzos
para la concreción de estos objetivos y a respetar cabalmente su compromiso en
la implementación del acuerdo de paz.
11. El curso dado a la decisión, tomada en la Cumbre de Bruselas de
1994, de intensificar y ampliar los esfuerzos políticos y los esfuerzos de
defensa de la Alianza contra los riesgos planteados por la proliferación de las
armas nucleares, biológicas y químicas (NBC), sigue siendo un motivo de seria
preocupación para la OTAN ya que puede constituir una amenaza directa a la
seguridad internacional. Seguimos siendo fieles a nuestro objetivo, comenzar
por prevenir la proliferación o, en caso de que ésta se produzca, revertir su
curso a través de los medios diplomáticos. Asegurar los medios para proteger a
sus miembros contra los riesgos que provoca la proliferación está dentro de las
incumbencias de la OTAN, en tanto alianza defensiva.
Los trabajos del Grupo político-militar de alto nivel sobre la
proliferación (SGP) y del Grupo de defensa de alto nivel sobre la proliferación
(DGP) -ambos creados después de la Cumbre de Bruselas de 1994- constituyen un
elemento clave para mantener la seguridad de la Alianza y forman parte de la
adaptación de la OTAN al nuevo escenario de seguridad con el que se enfrenta
Europa. Estamos satisfechos del progreso en los trabajos del SGP y hemos
ratificado las recomendaciones del DGP en pos del mejoramiento de los medios
militares de los que dispone la Alianza para responder a los riesgos planteados
por la proliferación de las armas NBC y de sus vectores.
12. En el marco de su adaptación global, la Alianza continuó adaptándose
a la nueva situación de seguridad con la que se enfrenta Europa, consolidó así
sus relaciones con los países partenaires y con otras organizaciones
internacionales que tienen un rol importante en el refuerzo de la seguridad y
de la estabilidad en la zona euroatlántica. Este desarrollo de la cooperación
hacia la apertura y la transparencia constituye hoy un elemento esencial del
concepto aliado de seguridad-cooperación.
13. Reafirmamos nuestro compromiso de abrir la Alianza a nuevos
miembros. El proceso de ampliación ya ha sido lanzado y estamos persuadidos de
que la adaptación global de la Alianza lo facilitará. De acuerdo a la decisión
tomada en diciembre de 1995, encaramos este año nuestro esfuerzo para hacer
avanzar los preparativos a tres niveles: mantenemos un diálogo intenso con los
países interesados, intentamos reforzar aún más el PFP para que facilite la
adhesión de nuevos miembros potenciales y aporte un sólido partenariato con la
OTAN a largo plazo a otros, y evaluamos permanentemente las adaptaciones
internas que son necesarias para la ampliación. Contamos con un informe sobre
las consultas que se efectúan actualmente en el marco del diálogo individual
intensificado que estamos llevando adelante con quince países interesados.
Esperamos el informe del Secretario General para nuestra próxima reunión en
diciembre, fecha en que evaluaremos lo hecho hasta entonces y discutiremos las
siguientes etapas.
La ampliación de la Alianza se enmarca en un vasto proceso de
cooperación y de integración que ya está en marcha en Europa y que hace
participar también a la Unión Europea y la UEO, la OSCE, el Consejo de Europa y
otras instituciones europeas. Nuestra estrategia consiste en ayudar a la
creación de una gran arquitectura de seguridad europea fundada sobre la
práctica de una verdadera cooperación con toda Europa.
14. El Partenariato para la Paz es hoy un elemento permanente de la
cooperación de seguridad en Europa y su valor fue demostrado por la operación
que la IFOR está llevando a cabo. Esta primera experiencia común en el seno de
la IFOR señala el camino de la cooperación futura en materia de seguridad.
Esperamos que las relaciones de cooperación establecidas entre aliados y partenaires
durante la operación de la IFOR contribuyan a reforzar el partenariato en el
futuro. Esperamos tomar nuevas medidas para mejorar la asociación de nuevos
partenaires a nuestros esfuerzos en pos de la promoción de la seguridad a
través de la cooperación regional, facilitando la participación de los GFIM en
una etapa temprana. Esto adquirirá fundamental importancia a medida que la
Alianza se adapte a sus nuevas misiones.
15. Nos complace la perspectiva de participar en nuestra undécima
reunión con nuestros partenaires del Consejo de Cooperación Nordatlántico.
Durante nuestra próxima reunión, en diciembre, analizaremos los progresos
logrados en lo que respecta al reforzamiento del rol del CCNA y en el
desarrollo de la cooperación entre aliados y partenaires sobre la base de un
informe del Consejo en sesión permanente.
16. Reafirmamos nuestro decidido apoyo a las reformas políticas y
económicas que Rusia lleva adelante. Próximamente, la Federación Rusa celebrará
elecciones presidenciales nacionales. Estamos persuadidos de que las mismas
constituirán un nuevo impulso en el proceso de reforma de este país.
Estamos convencidos de que el desarrollo de un partenariato sólido,
estable y duradero entre la OTAN y Rusia es un elemento esencial de la
seguridad en la zona euroatlántica. Reunidos aquí, en Berlín, reiteramos
nuestro ofrecimiento de amistad, partenariato y cooperación a Rusia.
Nos satisface plenamente la realización de importantes consultas que
contaron con dieciséis miembros más uno sobre, entre otros temas, la situación
en la ex Yugoslavia, la proliferación de armas de destrucción masiva, el
desmantelamiento de armas nucleares en condiciones de garantía y de seguridad
adecuadas, y el tratado sobre las FCE, y de la cooperación prestada en
diferentes campos dentro de las actividades de la OTAN. Estamos orgullosos de
la firma de un memorando de acuerdo sobre los planes civiles de emergencia y la
preparación en casos de catástrofe entre la Alianza y el Ministerio de la
Federación Rusa encargado de la protección civil, de las situaciones de
emergencia y de la eliminación de las consecuencias de las catástrofes
naturales. Consideramos que vamos a ampliar el alcance y la intensidad de las
relaciones con Rusia a nivel político y militar, de acuerdo con el enfoque planteado
en el documento sobre los "Aspectos en los que se debe continuar sobre el
camino de un amplio diálogo y una estrecha cooperación entre la OTAN y
Rusia" que ratificamos en junio de 1995. Reiteramos nuestra propuesta de
establecer un marco político para las relaciones OTAN-Rusia, que establecería
los principios fundamentales para la cooperación en materia de seguridad y la
constitución de mecanismos permanentes de consultas políticas.
17. Continuamos creyendo que una Ucrania independiente, democrática y
estable es uno de los elementos claves para la estabilidad y la seguridad en
Europa. Vemos con sumo agrado la activa participación de Ucrania en el CCNA y
en el Partenariato para la Paz. Desde nuestra última reunión, se han
profundizado las relaciones entre la OTAN y Ucrania gracias a la aplicación del
documento sobre el refuerzo de las relaciones OTAN-Ucrania adoptado en
septiembre de 1995 y gracias a la participación activa de Ucrania en la IFOR.
Nos complace la profundización de nuestro diálogo y de nuestra cooperación en
campos tan diversos como los planes civiles de emergencia, los asuntos
científicos y las actividades de información. En este contexto subrayamos que
Ucrania ha ofrecido dar apoyo al reforzamiento de las actividades de
información de la OTAN en su territorio. Deseamos desarrollar aún más nuestras
actividades de cooperación a través de trabajos concretos en los campos
planteados en el documento de septiembre de 1995 y aprovechar otras ocasiones
para seguir dando más solidez a nuestras relaciones. Nos satisface ampliamente
el anuncio hecho recientemente según el cual todas las armas nucleares fueron
retiradas del territorio de Ucrania para su desmantelamiento, de acuerdo a lo
establecido en la declaración tripartita americano-ruso-ucraniana firmada en
Moscú en enero de 1994.
18. Estamos decididos a redoblar esfuerzos en lo referente a la
información de la OTAN en Rusia y en Ucrania consultando a sus gobiernos. Hemos
encargado al Consejo en sesión permanente que tome medidas concretas en relación
a esto.
19. Seguiremos profundizando también nuestras relaciones de cooperación
con todos los nuevos Estados independientes en un plano bilateral y a través de
iniciativas de la Alianza. Su desarrollo democrático y económico, el
mantenimiento de su independencia, la soberanía y la integridad territorial son
factores esenciales de la estabilidad y de la seguridad de la zona
euroatlántica.
20. Nos complace el desarrollo de los lazos entre la OTAN y la UEO;
estamos decididos a ampliar y profundizar nuestra cooperación con ésta última
sobre la base de los principios acordados de complementariedad y de
transparencia. Nos complace enormemente retornar al contacto entre el Consejo
Permanente de la UEO y el SACEUR.
Seguimos dando nuestro apoyo a la UEO en sus esfuerzos por acentuar el
desarrollo de sus capacidades operacionales y estamos orgullosos también de las
decisiones tomadas en este sentido el pasado mes en la reunión ministerial de
la UEO que tuvo lugar en Birmingham.
21. La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE)
cumple un papel esencial en la seguridad y estabilidad europeas. Reafirmamos
nuestra voluntad de apoyar el enfoque global de la seguridad de la OSCE y la
elaboración de un modelo de seguridad para el siglo XXI. Destacamos la eficacia
de la OSCE en la prevención, la gestión y la resolución de conflictos, así como
el trabajo del Alto comisariado para las minorías nacionales. Constituyen
importantes contribuciones a la estabilidad regional que seguiremos apoyando y reforzando.
Estamos orgullosos del apoyo práctico que la OTAN ha dado a la OSCE a
través de su sección sobre la coordinación de la verificación, ayudando a
establecer medidas destinadas a verificar los elementos de control de
armamentos del acuerdo de paz. Estamos de acuerdo con el desarrollo de esta
cooperación pragmática entre la OTAN y la OSCE.
Nos preocupan profundamente los acontecimientos de Chechenia que
causaron tantos sufrimientos y produjeron tantas víctimas. El anuncio de cese
de fuego en Chechenia nos alegró profundamente y confiamos en su aplicación
plena y efectiva. Pedimos que se sostengan auténticas negociaciones que
permitan una solución pacífica del litigio gracias al ejercicio continuo de los
buenos oficios de la OSCE. Apoyamos los esfuerzos del grupo de Minsk para
lograr una solución política del conflicto del Alto Karabagh y alrededores.
22. Apoyamos el proceso de paz en el Cercano Oriente, y sugerimos a
todos los participantes continuarlo. Reafirmamos nuestra convicción de que la
seguridad en Europa recibe una fuerte influencia de la seguridad y la
estabilidad en el Mediterráneo. Atribuimos particular importancia al progreso
de nuestro diálogo sobre la zona mediterránea con países no miembros de la
OTAN. Egipto, Israel, Jordania, Marruecos, Mauritania y Túnez participan
actualmente en el diálogo político.
23. Apoyamos decididamente los trabajos que lleva adelante la
Conferencia del Desarme para lograr, en el mes de septiembre de este año a más
tardar, una prohibición completa y claramente verificable de todas las pruebas
nucleares a escala mundial y para iniciar negociaciones en pos de un tratado
sobre la interrupción de las transferencias de materiales fisibles según el
mandato establecido. Subrayamos la importancia de los tratados START para la
estabilidad y la seguridad internacionales y felicitamos a los Estados Unidos y
a Rusia por el cumplimiento de las obligaciones que suscribieron en el marco de
START 1. Nos complace que START 2 haya sido ratificado por el Senado americano
en el pasado mes de enero y solicitamos de inmediato la rápida ratificación por
parte de la Federación Rusa.
Solicitamos la inmediata entrada en vigencia y la plena implementación
de la convención sobre las armas químicas y mantenemos nuestros esfuerzos para
negociar un régimen de aplicación de la convención sobre las armas biológicas y
tóxicas. Convocamos a los países que aún no lo han ratificado a firmar
rápidamente el Tratado Cielo Abierto.
24. Nos congratulamos del resultado positivo de la conferencia de
análisis del tratado sobre las FCE en Viena. El Documento final aprobado por
los treinta Estados Partes reafirma su voluntad de preservar la integridad del
tratado y de garantizar su aplicación plena. El éxito de la Conferencia
confirma que el tratado sobre las FCE es y seguirá siendo una piedra angular de
la seguridad y de la estabilidad europeas. Convocamos a los Estados Partes que
aún no han cumplido con sus obligaciones de reducción a hacerlo lo antes
posible.
25. Apoyamos los esfuerzos realizados para combatir al terrorismo,
flagelo universal que es aún hoy motivo de preocupación para cada uno de
nosotros. Nos alegramos de las crecientes sensibilización y cooperación
internacionales en lo que respecta al terrorismo desde nuestra última reunión y
subrayamos la importancia de las conclusiones de la Cumbre de Cheikh y Cheikh y
del progreso de los trabajos de la comunidad internacional en los recintos
correspondientes.
26.
Agradecemos profundamente al gobierno de Alemania que nos haya permitido
realizar aquí esta reunión.