OTAN
(Bruselas, 10 de diciembre de 1996)
1. La nueva OTAN toma forma de una manera que refleja los cambios fundamentales
del desarrollo de la seguridad en Europa y la vitalidad que guarda la asociación transatlántica
sobre la cual se apoyan nuestros esfuerzos. La adaptación y la reforma de
la Alianza van por la buena senda.
La Alianza está resuelta a preservar su fuerza política y militar,
garantía de su aptitud para completar toda la gama de sus misiones, como lo
muestran claramente el IFOR y la fuerza que es llamada a sucederle en
Bosnia-Herzegovina, la SFOR. Hemos difundido una declaración separada sobre
este aspecto. La Alianza continuará reforzando la seguridad europea preservando
su capacidad de defensa colectiva, admitiendo nuevos miembros, extendiendo y
reforzando las relaciones de cooperación con todos los partenaires, y
comprometiéndose por el establecimiento de una asociación de seguridad sólida
con Rusia y de una relación específica con Ucrania, y realizando la identidad
europea de seguridad y de defensa en el seno de la Alianza.
La evolución de la Alianza se inscribe en el marco de una estructura de
seguridad europea cooperativa, a la edificación de la cual concurriremos.
Aceptamos con satisfacción la contribución que aportan las decisiones
importantes tomadas por la reciente Cumbre de la OSCE en Lisboa, así como la
decisión adoptada por los Estados Partes del Tratado sobre las FCE de empezar,
al inicio de 1997, las negociaciones para adaptar el Tratado a la evolución del
desarrollo de la seguridad europea.
2. En este contexto, hemos decidido invitar a nuestros Jefes de Estado y
de Gobiernoa una reunión en la Cumbre de Madrid el 8 y 9 de julio de 1997 para
trazar la vía que deberá seguir la Alianza al acercarse el siglo XXI, de manera
de consolidar la seguridad euro-atlántica. Para atender este objetivo, las
decisiones tomadas por la Cumbre se referirán a la adaptación interna de la
OTAN, la apertura de la Alianza y su aptitud en el desarrollo de sus nuevos
roles y de sus nuevas misiones. El orden del día de esta Cumbre incluirá las
siguientes medidas:
- adoptar una nueva estructura de comandancia que permita una plena
participación de todos los aliados, y hacer progresar también el trabajo del
conjunto de los Grupos de Fuerzas Interarmadas Multinacionales (GFIM), en vías
de reforzar la aptitud de la Alianza para remplazar toda la gama de sus
misiones, tanto preservando la capacidad de defensa colectiva, como la base de
una asociación transatlántica sólida;
- finalizar todos los arreglos necesarios para la formación de la
Identidad Europea de Seguridad y de Defensa (IESD) en el seno de la OTAN, que
permitirá la preparación y la conducción de operaciones dirigidas por la UEO
con la participación de todos los Aliados europeos que lo deseen;
- invitar a uno o más países que hayan manifestado el deseo de adherir a
la Alianza para entablar negociaciones sobre su acceso;
- proseguir las consultas con los países interesados en ser miembros de
la OTAN;
- estrechar las relaciones de cooperación con todos nuestros
partenaires, comprometer en el marco de un Partenariato para la Paz (PFP)
reforzado, en vistas a crear un Consejo de Asociación Atlántica.
- intensificar y consolidar las relaciones con Rusia más allá del
Partenariato para la Paz, en vista al futuro, lo más pronto posible, en un
acuerdo sobre el desarrollo de una asociación de seguridad sólida, estable y
durable;
- proseguir y reforzar el desarrollo de relaciones con Ucrania;
- intensificar nuestro diálogo sobre la zona mediterránea con países no
miembros de la OTAN;
- desarrollar nuestra aptitud en cumplir nuevos roles y nuevas misiones
en relación con la prevención de conflictos y la gestión de crisis;
- aumentar nuestros esfuerzos políticos y de defensa contra la
proliferación de armas nucleares, biológicas y químicas, así como sus vectores.
3. Aceptamos con una viva satisfacción, la decisión del gobierno
español, ratificado por el Parlamento español, el 14 de noviembre de 1996, de
tomar las disposiciones necesarias para participar en la nueva estructura de la
Alianza. La participación de España reforzará también la cohesión y la eficacia
militar de la Alianza, consolidará la unión transatlántica y ayudará a
desarrollar la IESD en el seno de la Alianza.
4. La estabilidad y la seguridad en el conjunto de la zona
euro-atlántica son nuestro principal objetivo. Queremos ayudar a construir las
estructuras de seguridad europea cooperativa que se dirija a los países
europeos, sin excluir a ninguno, ni crear líneas de división. Las decisiones
relativas a la cooperación en materia de seguridad europea que han sido tomadas
recientemente en la reunión cumbre de la OSCE en Lisboa, y la decisión de
adoptar el Tratado sobre las FCE al nuevo desarrollo de seguridad en Europa,
estabilizan una base cooperativa para nuestra seguridad común. La Alianza, por
su lado, ha desarrollado un marco general de cooperación intensiva con los
países asociados del Consejo de Cooperación Nordatlántico (CCNA) y del PFP y
con otras organizaciones internacionales y contribuye así a la seguridad y a la
estabilidad en la zona euro-atlántica. Con el mismo espíritu obramos para abrir
la Alianza a los nuevos miembros y construiremos una asociación de seguridad
sólida, estable y durable con Rusia, reforzaremos nuestras relaciones con
Ucrania e intensificaremos nuestro diálogo sobre la zona del Mediterráneo.
5. Reafirmamos que las fuerzas nucleares de los Aliados continúan
jugando un rol único y esencial en la estrategia aliada de prevención de la
guerra. El engrandecimiento de la Alianza no hará necesaria una modificación
del dispositivo nuclear actual de la OTAN y, en consecuencia, los países de la
OTAN no tienen ninguna intención, ningún proyecto ni ninguna razón de desplegar
las armas nucleares sobre el territorio de los nuevos miembros, no teniendo
ninguna necesidad de modificar algún aspecto del dispositivo o de la política
nuclear de la OTAN - y no prevemos ninguna necesidad para el porvenir.
6. Un cierto número de países aspiran a ser miembros plenos de nuestra
Alianza y ello requiere trabajos de preparación y de reformas intensivas de
grandes dimensiones. Recomendamos a nuestros Jefes de Estado y de Gobierno
invitar a la reunión Cumbre del año próximo a uno o varios de estos para
intensificar las negociaciones sobre su incorporación. Nuestro objetivo es
aceptar nuevos miembros antes del cincuenta aniversario de la OTAN, en 1999.
Hemos nombrado al Consejo de sesión permanente que preparará las
recomendaciones globales en vista de la decisión a tomar en la Cumbre sobre cuál(es)
país(es) invitar para iniciar negociaciones sobre su incorporación. Este
proceso debería comportar:
- un diálogo intenso con los países asociados interesados,
comprometiendo «a 16 más 1», en caso de necesidad;
- el análisis, sobre la base de directivas políticas complementarias
para elaborar por el Consejo en sesión permanente, de los factores pertinentes
para la admisión de nuevos miembros potenciales;
- la preparación de recomendaciones sobre la adaptación de las
estructuras de la Alianza para la integración de nuevos miembros;
7. Nos alegramos con las perspectivas de la reunión del CCNA que se
tendrá mañana y que coincidirá con su cincuenta aniversario. El CCNA nos ha
dado, con el correr de los años, una posibilidad preciosa de proceder a las
consultas regulares con nuestros partenaires sobre las cuestiones políticas y
de seguridad. Gracias al CCNA y al Partenariato para la Paz, hemos logrado
desarrollar aproximaciones comunes a la seguridad europea y a los países del
CCNA, en un espíritu de cooperación y empeño común en favor de la seguridad
europea. Queremos vigilar los objetivos del CCNA; a saber el aumento de la
transparencia y de la confianza entre los Estados miembros en lo que concierne
a las cuestiones de seguridad, como objetivo de toda cooperación futura. A fin
de obtener el mejor partido de las reuniones del CCNA, queremos profundizar
también nuestro diálogo político.
8. Felicitamos la evolución dinámica del Partenariato para la Paz y del
rol que juega en el refuerzo de la cooperación en materia de seguridad europea.
Hubo progresos sustanciales en la puesta y contenido de nuestra cooperación en
el seno del Partenariato, en particular la diversidad creciente de ejercicios,
la extensión y la profundización del proceso de planificación y de examen del
PFP, la intensificación de trabajos sobre las relaciones cívico-militares, así
como los planes civiles de urgencia y los seguros en casos de catástrofe. Con
la operación encaminada actualmente por el IFOR, en el marco de la cual trece
de nuestros partenaires cooperan con las fuerzas armadas de la Alianza, el PFP
ha dado prueba de su utilidad en lo que concierne al empeño político en materia
de gestión conjunta de crisis y de interoperatibilidad militar.
Intentamos desarrollar, sobre la base del principio de transparencia,
lazos de cooperación más estrechos y profundos abiertos a todos los países
partícipes, buscando un Partenariato más operacional, reforzando la consulta
política, teniendo en cuenta las actividades respectivas de la OSCE y de las
instituciones europeas competentes, tal como la UEO y la UE. A este efecto, la
Alianza ha ubicado un Grupo de alto nivel con vista a establecer, para la
reunión Cumbre, un Partenariato para la Paz claramente reforzado y, por ello,
atrayente. Recibimos un informe interino sobre los trabajos en curso y
estimamos necesario emprender sin tardar los trabajos para poner en marcha las
recomendaciones. Estos preconizan:
- reforzar la dimensión política del Partenariato ofreciendo las
posibilidades incrementadas de consultas políticas;
- extender los dominios agregados a las misiones militares incorporando
en el marco de la PFP a toda la gama de nuevas misiones de la Alianza que
tengan lugar y comprometiendo en las operaciones de sostenimiento de la paz a
los dominios ya incorporados;
- extender el programa de ejercicios de la PFP de la OTAN de acuerdo a
la extensión del Partenariato;
- dar a los países participantes la posibilidad de participar en la
planificación y la ejecución de las actividades de la PFP (ejercicios y
operaciones);
- hacer participar a los partenaires más activamente en el programa de
trabajo ordinario en tiempo de paz;
- ofrecer a los participantes que tomen parte de las operaciones futuras
del PFP conducidas por la OTAN, la posibilidad de contribuir a la definición de
orientaciones políticas concernientes a éstas operaciones y a la supervisión
política de ellas, sobre la base de la experiencia adquirida en el marco de la
operación «Esfuerzo concertado»;
- examinar, concertando con los partenaires, las modalidades posibles de
elaboración de un marco político-militar para las operaciones del PFP, sobre la
base de los trabajos en curso del Comité director político-militar;
- reforzar la participación de los partenaires al proceso de toma de
decisiones concernientes a cuestiones ligadas al programa de PFP;
- desarrollar la cooperación regional en el seno del Partenariato para
la Paz;
- desarrollar el proceso de planificación y examen.
Desde el momento en que los acuerdos de Bruselas sobre el status de las
misiones y de las representaciones de terceros Estados al lado de la OTAN
entren en vigor, deberán ofrecer a los partenaires la posibilidad de establecer
las misiones diplomáticas al lado de la OTAN.
Hemos encargado al Consejo de sesiones permanente atender la puesta en
marcha, sin retardo, de estas recomendaciones, proseguir los trabajos sobre el
refuerzo del PFP y examinar los términos de financiamiento común y de recursos,
a fin de suministrar a la reunión ministerial de primavera, un nuevo informe
que incluya las recomendaciones para toma de decisiones.
9. Con el rápido desarrollo de nuestras actividades en el contexto del
CCNA y del PFP, parece necesaria una red de cooperación más coherente en un
marco que establezca un proceso de cooperación y de consulta más racional y más
productiva con los partenaires, explorando los elementos del CCNA y del PFP que
los partenaires y nosotros mismos juzguemos más útiles. A este fin, hemos
decidido trabajar con nuestros partenaires sobre la iniciativa de crear un
Consejo de Asociación Atlántica (CAA), nuevo mecanismo de cooperación única que
constituya un marco permanente de acuerdo sobre los esfuerzos en materia de
cooperación práctica en el contexto del PFP y para desarrollar la dimensión
política del Partenariato. Hemos por consecuencia modificado el Consejo en
sesión permanente a fin de establecer en coordinación con los partenaires, las
modalidades concernientes a un organismo tal, para nuestra próxima reunión.
10. Afirmamos nuestro apoyo al proceso de reforma política y económica
en la Federación Rusa. Felicitamos la realización de elecciones presidenciales
históricas en Rusia. Saludamos los progresos cumplidos sobre la vía de un
acuerdo durable y pacífico del conflicto de Chechenia.
Un vasto proceso de integración y de cooperación se desarrolla en
Europa: Rusia tiene su lugar de par por su pertenencia a la OSCE y al Consejo
de Europa y por sus relaciones con la OTAN, con la Unión Europea y la UEO. El
esquema de consulta articulado en torno de nuestras discusiones regulares «en
16 más 1», ofrece una base sólida sobre la cual sostenernos. Nos felicitamos de
la participación de Rusia en el PFP y alentamos a sacar plenamente partido de
las posibilidades que ofrece.
Apreciamos la cooperación estrecha y eficaz entre Rusia y la OTAN en el
seno del IFOR. Saludamos y recibimos con satisfacción el hecho que Rusia haya
decidido contribuir en una operación destinada a consolidar la paz en
Bosnia-Herzegovina.
Reiteramos hoy nuestro empeño en favor de una asociación de seguridad
sólida, estable y durable entre la OTAN y Rusia. Esta asociación demuestra que
la seguridad europea está entrando en una era fundamentalmente nueva, más rica
en promesas, constituye un elemento importante de la construcción de una
seguridad cooperativa europea en la cual Rusia tiene una contribución esencial
para aportar. Aumenta también la estabilidad y la seguridad en la zona
euro-atlántica. Nuestro objetivo es entendernos con la Federación Rusa, de aquí
la Cumbre sobre las disposiciones para profundizar y extender el aporte de las
relaciones que tenemos hoy con este país y de ofrecer un marco para su
desarrollo futuro. Queremos hacer que la OTAN y Rusia dispongan de un mecanismo
de consulta y de cooperación sólida y flexible. Esta entente podría traducirse
en un documento o tomar la forma de una carta sobre:
- los principios comunes que serán la base de nuestras relaciones;
- un vasto conjunto de sectores de cooperación práctica, en particular
en los dominios político, militar, económico, de desarrollo y científico, así
como en materia de mantenimiento de la paz, de armamentos, de no proliferación,
de limitación de armamentos y de planes civiles de urgencia;
- mecanismos que permitan realizar consultas sobre base regular y ad
hoc;
- mecanismos de unión y de cooperación militar.
Encargaremos en consecuencia al Consejo en sesión permanente elaborar
estas cuestiones sobre las cuales el Secretario General podría explorar con
Rusia la posibilidad de una entente.
11. Continuamos sosteniendo a Ucrania en la medida que ella se
desarrolle como nación democrática y país de economía de mercado. El
mantenimiento de la independencia, de la integridad territorial y de la
soberanía de Ucrania es un factor crucial para la estabilidad y la seguridad en
Europa.
El hecho que Ucrania desarrolle una relación sólida y durable con la
OTAN es un aspecto importante de la arquitectura de seguridad europea en
marcha. Sostenemos la participación activa de Ucrania en el PFP y observamos
con interés el ejercicio que se realizará el año próximo cerca de Lvov.
Apoyamos también la cooperación de Ucrania con las instituciones europeas tal
como la UE y la UEO. Ucrania ha aportado una contribución importante al IFOR y
al ATNUSO, y felicitamos su empeño en tomar parte de una operación destinada a
consolidar la paz en Bosnia-Herzegovina.
Tomamos nota con satisfacción de la reciente reunión de la Alianza y de
Ucrania sobre las cuestiones relativas a la proliferación de armas de
destrucción masiva. Felicitamos el progreso cumplido con la instalación de una
oficina de información de la OTAN en Kiev, y seguimos con interés la cercana
apertura. Requerimos el interés activo que tiene Ucrania al refuerzo de sus
relaciones con la Alianza. Estamos resueltos a desarrollar, en el curso del mes
próximo, por la vía de consulta de alto nivel y otras, una relación
OTAN-Ucrania específica y efectiva que podría ser oficializada, quizás de aquí
a la Cumbre, sobre la base del documento concerniente al refuerzo de las relaciones
OTAN-Ucrania adoptado en septiembre de 1995, y de proposiciones hechas
recientemente por Ucrania.
12. Sostenemos el proceso de paz en el Cercano Oriente e invitamos
insistentemente a todos los participantes a no abandonar las negociaciones.
Reafirmamos nuestra convicción de que la seguridad en Europa está
estrechamente ligada a la seguridad y a la estabilidad de la región
Mediterránea, uno de los diversos componentes de la arquitectura de la
seguridad europea. En esta consideración, intensificaremos nuestras relaciones
con los países mediterráneos no miembros de la OTAN por medio del diálogo.
Este diálogo complementa otras iniciativas internacionales, como el
proceso de Barcelona, de la OSCE y de la UEO. Aceptamos con satisfacción el
informe del Consejo en sesión permanente sobre los progresos cumplidos en el
diálogo con los países del Mediterráneo y sobre las medidas recomendadas por el
desarrollo del diálogo político y de otras actividades aceptadas por la
Alianza. Egipto, Israel, Jordania, Marruecos, Mauritania y Túnez han reafirmado
el interés que prestan al desarrollo de nuestras relaciones. Hemos decidido
reforzar nuestro diálogo sobre el Mediterráneo de modo progresivo y hemos
encargado al Consejo en sesión permanente para nuestra próxima reunión, la
puesta en marcha de las actividades previstas en el informe así como sus
posibilidades de desarrollo posterior.
13. Concluimos el proceso de adaptación interna de la Alianza con el
objetivo fundamental de garantizar la eficacia militar de la misma, de mantener
la unión trasatlántica y de desarrollar al IESD en el seno de la OTAN. En
conformidad con las decisiones tomadas por los Jefes de Estado y de Gobierno de
la OTAN en la reunión Cumbre de 1994 y por los Ministros en su reunión de junio
último, en Berlín y en Bruselas, y en vista de preparar la Cumbre del año
próximo, hemos fijado principalmente nuestra atención sobre tres aspectos
estrechamente ligados: el establecimiento de una nueva estructura de comando
para la Alianza, la puesta en marcha del concepto de GFIM, y el desarrollo de
la IESD en el seno de la OTAN.
14. Felicitamos el progreso realizado en la elaboración de la estructura
de comando futuro. Insistimos intensamente al Consejo en sesión permanente y al
Comité militar la finalización de los trabajos lo más rápido posible. Cuando
sean aprobados, esta nueva estructura ayudará a asegurar la eficacia militar de
la Alianza de modo que ella sea capaz de remplazar su misión tradicional de
defensa colectiva, de adoptar nuevos roles en las circunstancias cambiantes, y
de prever una participación creciente de países asociados. Constituirá una
estructura renovada de comando multinacional, único reflejo de la situación
estratégica en Europa y permitirá un plan de participación de todos los
aliados.
15. Felicitamos los progresos logrados en la concreción del concepto de
GFIM, sobre la base del Marco político-militar global que hemos aprobado en
junio último. Daremos instrucciones al Consejo en sesión permanente y a las
autoridades militares de la OTAN de proseguir resueltamente los trabajos de
informar las operaciones futuras de la Alianza, comprometiendo la participación
eventual de países exteriores a la Alianza, así como el desarrollo de la IESD.
16. Tomamos nota con satisfacción de los procesos cumplidos en la
elaboración de acuerdos apropiados para el IESD en el seno de la OTAN,
conformando las decisiones de la Cumbre de Bruselas y de nuestra reunión de junio
último en Berlín.
17. Tomamos nota en particular de las medidas tomadas en vista de la
aplicación del concepto de capacidad separable aunque no separada a:
- las decisiones del Consejo en sesión permanente sobre las directivas
políticas concernientes a la elaboración, en el seno de la OTAN, de
disposiciones de comando europeo que permiten la preparación y la conducción de
operaciones dirigidas por la UEO.
- las decisiones del Consejo en sesión permanente sobre las
disposiciones relativas a la identificación de capacidad y medios de la OTAN
que podrían ser puestos a disposición del UEO en una operación dirigida por
ella;
- las medidas del Consejo en sesión permanente relativas a las
modalidades de cooperación con la UEO;
- los progresos registrados en los trabajos concernientes a la
planificación y la conducción de ejercicios en operaciones dirigidas por la
UEO.
18. Hemos encargado al Consejo en sesión permanente someter a las
reuniones ministeriales de primavera de 1997 un informe sobre la adaptación de
estructuras y procedimientos de la Alianza concernientes a la estructura de
comando futuro, la puesta en marcha del concepto de GFIM y los nuevos progresos
alcanzados en el desarrollo de la IESD en el seno de la Alianza.
19. Felicitamos la cooperación estrecha entre la OTAN y la UEO. La UEO
busca ahora llegar a un acuerdo sobre la participación de todos los aliados
europeos en las operaciones dirigidas por ella utilizando los medios y las
capacidades de la OTAN. Será una contribución fundamental al desarrollo de la
IESD en el seno de la Alianza. Hemos encargado al Consejo en sesión permanente
desarrollar las relaciones OTAN-UEO, a fin de asegurar una cooperación eficaz
en la preparación de eventuales operaciones dirigidas por la UEO.
20. Saludamos el nacimiento de la Cumbre de la OSCE en Lisboa, y en
particular la adopción de una declaración sobre la seguridad, resultado de los
trabajos sobre el modelo de seguridad común y global para el siglo XXI. La
cumbre de Lisboa ha creado un marco de seguridad permanente con la
participación, en un pie de igualdad, de todos los Estados europeos. El modelo
de seguridad adoptado en Lisboa es una expresión global de los esfuerzos
emprendidos por reforzar la seguridad y la estabilidad. Se refuerzan así
mutuamente, la OTAN y otras instituciones y organizaciones europeas y
transatlánticas. Sostenemos la gran importancia de la OSCE en tanto instrumento
fundamental de la diplomacia preventiva, de prevención de conflicto, de
relevamiento luego de un conflicto y de cooperación en materia de seguridad
regional así como el refuerzo de su capacidad operacional para conducción de
estas tareas. Estimamos que la OSCE, única organización de seguridad
paneuropea, tiene un rol esencial en el mantenimiento de la paz y la
estabilidad de Europa. Los principios y empeños sobre los cuales está fundada
la OSCE constituyen las normas del desarrollo de una estructura de seguridad
europea global y cooperativa.
Rendimos homenaje a la OSCE por su contribución esencial a la puesta en
marcha de aspectos civiles del Acuerdo de paz de Bruselas en
Bosnia-Herzegovina, donde se ocupa en particular de supervisar la preparación
de las elecciones, de promover los derechos del Hombre y de vigilar la
aplicación de los acuerdos sustentados sobre las medidas de confianza y de
seguridad y sobre la regulación de armamento al nivel subregional. La OSCE
demuestra así el rol central que juega en favor de la estabilidad y de la
seguridad regionales.
La cooperación entre la OSCE y el IFOR es una buena muestra de
organizaciones reforzándose mutuamente. La ayuda concreta dada por la OTAN a la
OSCE para verificar la aplicación de los acuerdos sobre las medidas de
confianza y sobre la limitación de armamento previsto en los Acuerdos de
Dayton, testimonian una cooperación creciente entre ambas Organizaciones.
El desarrollo democrático y económico así como la independencia, la
soberanía y la integridad territorial de todos los Estados son factores
esenciales de la estabilidad y de la seguridad en la zona euro-atlántica.
Rendimos homenaje a la OSCE por sus esfuerzos de mediación en cierto número de
conflictos regionales a través de diversas misiones y por su trabajo en el Alto
Comisionado por las Minorías nacionales. Sostenemos los esfuerzos que
desarrolla el Grupo Minsk para prevenir el conflicto de Alto-Karabagh y
alrededores.
Los resultados obtenidos por la OSCE en materia de desarme, de control
de armamento y de medidas de confianza y de seguridad continúa aportando una
contribución importante a la estabilidad política y militar. Felicitamos la
reciente adopción, por el Forum para la Cooperación en materia de seguridad,
del Marco para la limitación de armamentos.
21. El Tratado sobre los FCE constituye la piedra angular esencial de la
estabilidad y de la seguridad en la zona euro-atlántica. Estamos determinados a
conservarlo y consolidarlo. Conforme a nuestro objetivo más general que es
reforzar la cooperación política y la estabilidad militar en una Europa sin
división, felicitamos la decisión, tomada el 1º de diciembre de 1996 en Lisboa
por los treinta estados parte del Tratado sobre los FCE, de comprometer las
negociaciones para adoptar el Tratado a la evolución del desarrollo de
seguridad en Europa. Nos regocijamos por la perspectiva de continuar, en enero
de 1997, las negociaciones en el seno del Grupo consultivo común en Viena sobre
la base del documento concerniente al alcance y los mandatos adoptados en
Lisboa.
Invitamos insistentemente a todos los Estados partes que no lo han hecho
todavía a aprobar este Tratado antes de la expiración del período de aplicación
provisoria que ha sido prolongado.
Estimamos que el Tratado sobre el FCE debe continuar jugando un rol
clave para garantizar la estabilidad militar hasta el inicio del siglo XXI y
más allá, y estamos determinados a adoptar rápidamente el Tratado para tener en
cuenta los nuevos desafíos en materia de seguridad.
22. Subrayamos la importancia de los Tratados START para la estabilidad
y la seguridad internacional. Tomamos nota con satisfacción de los progresos
cumplidos por los Estados Unidos y la Federación Rusa en la puesta en marcha
del Tratado START I. Demandamos insistentemente a la Federación Rusa proseguir
con los Estados Unidos la ratificación del Tratado START II.
Felicitamos los sucesos que representan la conclusión del Tratado de
prohibición completa de ensayos nucleares y su firma por la gran mayoría de los
miembros de las Naciones Unidas, y llamamos insistentemente a todos los otros
países a firmar este importante acuerdo internacional de limitación de
armamento. Nos regocijamos de la apertura de la breve brecha de las
negociaciones concernientes a un tratado sobre la detención de transferencia de
material fisible.
Aceptamos con satisfacción la próxima Convención sobre armas químicas.
Nos regocijamos que los Estados Parte de la Convención sobre armas biológicas y
tóxicas reconozcan en la Cuarta Conferencia de Examen, en Ginebra en diciembre
de 1996, que una verificación efectiva podría reforzar la convención.
Demandamos insistentemente la ratificación del Tratado de Cielo Abierto
a los países que no lo han hecho.
23. La proliferación de armas nucleares, biológicas y químicas y sus
vectores son para nosotros un motivo de seria preocupación. Queremos
resoluciones para comenzar a prevenir la proliferación o, si se produce,
eliminarla por los medios diplomáticos. Recibimos con satisfacción el informe
del Comité mixto sobre la proliferación concerniente a los trabajos del Grupo
político-militar de alto nivel sobre proliferación y del Grupo de Defensa de
alto nivel sobre la proliferación y les recomendamos seguir sus actividades
esenciales.
Consideramos que es particularmente importante continuar los trabajos
del Comité preparatorio sobre el proceso de refuerzo del Tratado de No
Proliferación Nuclear (TNP) que se debería iniciar en abril de 1997. Este
proceso contribuirá en forma significativa a reforzar también el TNP que es la
piedra angular del sistema de no proliferación a escala mundial.
24. Reafirmamos nuestro empeño en la consideración de los programas de
la Alianza financiados en común.
Tomamos nota con satisfacción de los progresos registrados en la
afectación de recursos existentes a los programas que tienen prioridad más
alta, como el Partenariato para la Paz y las medidas en favor de una
intensificación de actividades de información en Moscú y Kiev. Hemos encargado
al Consejo en sesión permanente continuar el examen de la afectación de
recursos en vista de asegurar su utilización óptima. Hemos también encargado al
Consejo en sesión permanente determinar la incidencia de la adaptación sobre
los presupuestos de financiamiento común de la OTAN y formular las
recomendaciones apropiadas para tomar en cuenta estas incidencias.
25. Continuamos sosteniendo todos los esfuerzos desplegados para
combatir el terrorismo que constituye una grave amenaza para la paz, la
seguridad y la estabilidad.
26. La reunión de primavera de 1997 del Consejo del Atlántico Norte en
sesión ministerial tendrá lugar el 29 de mayo de 1997 en Sintra (Portugal).