Presentación
Durante el año 2001 el Departamento de Europa y Comunidad de Estados
Independientes ha permanecido continuamente en contacto con las delegaciones
diplomáticas de los países involucrados. Se destacan las
fructíferas conversaciones mantenidas con S. E. Edmond Trako -Albania-,
Ara Avizaian -Armenia-, Vadim Lazerko -Belarús-, Atanas Budev -Bulgaria-,
Dusko Ladan -Bosnia y Herzegovina-, Evgeny Astakhov -Federación
de Rusia-, Georges Georgiu -Grecia-, M. Saeed Khalid -Pakistán-,
Eugeniusz Noworyta -Polonia-, Cristian Lazarescu -Rumania-, Gojko Celebic
-Yugoslavia-, con los Ministros Consejeros Ihor Hrushko y Mykhailo Chubukóv
_Ucrania-, Ministros Plenipotenciarios y Encargados de Negocios Gordana
Mestrovic -Croacia-, Tomaz Kunstelj -Eslovenia-, Wlodzimierz Gurnik -Polonia-,
los Primeros Secretarios Vladimir Grushevich -Belarús- y Anatoly
Zhelezniak -Federación de Rusia-, así como con los Cónsules
de las Repúblicas de Letonia Mirdza Restvergs de Zalts y Estonia
Peet Pullisaar.
Se han realizado gestiones con la Dra. Liudmila Okuneva a fin de ultimar
detalles para la firma de un convenio entre el Instituto Estatal de las
Relaciones Internacionales de Moscú (Universidad) y el Instituto
de Relaciones Internacionales (UNLP).
Este Departamento ha tenido activa presencia en congresos, seminarios
y conferencias en el país y en el exterior y participado en las
VI Jornadas de Historia de las Relaciones Internacionales realizadas en
Santiago de Chile durante el mes de noviembre.
En esta presentación el comentario "Consideraciones sobre
Europa y la Comunidad de Estados Independientes durante 2001" me
corresponde y "EX URSS 2001" es una colaboración de Alejandro
Simonoff.
En cuanto a la cronología, agradezco la colaboración de
Javier Surasky en lo referido a Unión Europea, de Gabriel Chapunov
para Europa Central, de Cecilia Sarmiento y Patricio Ciliberti para Europa
occidental, nórdica y mediterránea y de Alejandro Simonoff
para la Comunidad de Estados Independientes.
Los documentos referidos a UE y OSCE fueron posibles gracias a la cooperación
de Javier Surasky y los restantes son traducción libre de sus versiones
en francés e ingles realizadas por esta coordinación.
Isabel Stanganelli
Coordinadora del Depto. Europa y CEI
Consideraciones sobre Europa y la Comunidad de Estados Independientes
durante 2001.
2001 fue un año inquietante para Europa y la CEI, al que podría
dividirse en dos etapas, previa y posterior a los atentados sufridos por
EE.UU. en septiembre.
A-. En la primera etapa la sucesión de medidas adoptadas por EE.UU.
en los años anteriores alcanzó su clímax con la decisión
por la potencia americana de retirarse del Tratado ABM, que dejó
en Europa una fuerte impresión de que el creciente unilateralismo
de EE.UU. la postergaba como interlocutor destacado.
Entre las medidas estadounidenses previas que incomodaron a muchos Estados
-no solamente europeos- se pueden mencionar la oposición al tratado
sobre diversidad biológica de junio de 1992; en diciembre de 1997
el rechazo a la prohibición del uso de minas terrestres o antipersonal;
en octubre de 1999 la no ratificación del tratado que prohibe el
desarrollo de armas nucleares -Comprehensive Test Ban Treaty-; en enero
2001 el repudio a la decisión de firmar un acuerdo para establecer
un tribunal penal internacional. EE.UU. se retiró en marzo 2001
del Protocolo de Kyoto sobre reducción de las emisiones de gases
de efecto invernadero, en julio de 2001 reanudó el controvertido
proyecto de construir defensas antimisiles -que invalidaría el
Tratado ABM-, en julio de 2001 -tras siete años de deliberaciones-
abandonó las negociaciones para poner en vigencia un tratado sobre
armas biológicas y en julio de 2001 rehusó la firma de un
pacto para controlar las armas pequeñas -objeta toda interferencia
al derecho de sus ciudadanos a portar armas-.
Muchos países europeos de la OTAN coincidieron en mantener el Tratado
ABM, especialmente Francia, Alemania e Italia. Putin propuso en un primer
momento compartir ese sistema entre Rusia la OTAN y la UE como señal
de cooperación mutua frente a posibles amenazas atómicas
y cancelar la iniciativa del escudo antimisiles norteamericano advirtiendo
a EE.UU. y a la OTAN que las estrategias de ambas complotan contra el
equilibrio estratégico internacional.
La respuesta más inmediata y preocupante para Europa fue el Tratado
de Amistad y Cooperación signado en julio de 2001 entre la Federación
de Rusia y la República Popular de China y fundado en la igualdad,
la confianza y la concertación estratégica, en la no injerencia
en sus asuntos internos, de la igualdad, de la ventaja mutua y de la coexistencia
pacífica. Ambas potencias se comprometieron a profundizar las medidas
de confianza en el dominio militar a fin de reforzar la seguridad de ambas
y de colaborar con la estabilidad regional e internacional y en caso de
aparición de una situación que constituya una amenaza para
la paz, procederán a las consultas en vías de eliminar la
amenaza considerada. También se comprometieron en la prevención
de conflictos internacionales y de su reglamento político, el mantenimiento
del equilibrio y la estabilidad estratégica global.
Se comprometen a reforzar el rol central de las Naciones Unidas, en tanto
organización internacional constituida por todos los Estados soberanos,
desatacando que la responsabilidad esencial en materia de mantenimiento
de la paz y de la seguridad internacionales incumbe al Consejo de Seguridad
de las Naciones Unidas. El presente tratado tendrá una duración
de veinte años. Será tácitamente renovado de cinco
en cinco años si alguna de las Partes contratantes, un mes antes
de la expiración de la duración de la validez correspondiente,
no notifica por escrito a la otra Parte contratante su intención
de ponerle fin.
Poco antes -el 15 de junio 2001- el Grupo de Shanghai proclamó
la creación de la Organización de Cooperación de
Shanghai como consecuencia de la incorporación de Uzbekistán
al organismo preexistente conformado por Kazakhstán, China, Kirghizstán,
Rusia y Tadjikistán. El objetivo de esta Organización es
reforzar la confianza mutua, el buen entendimiento y la amistad entre
los Estados miembros; instar a los Estados a cooperar eficazmente en los
dominios político, económico y comercial, científico
y técnico, cultural, educativo, de la energía, de los transportes
y de la protección del ambiente; obrar en común al mantenimiento
y preservación de la paz, de la seguridad y de la estabilidad regionales:
instaurar un nuevo orden internacional político y económico
democrático, equitativo y razonable. Para ello coordinará
su accionar para aplicar la "Convención de Shanghai para la
lucha contra el terrorismo, el secesionismo y el extremismo" que
abarca la creación en Bishkek del "Centro antiterrorista de
la Organización de Shanghai" así como la elaboración
de los textos de cooperación multilateral pertinentes a fin de
eliminar el tráfico de armas y de drogas, la emigración
clandestina y otras actividades criminales.
Pese a la crisis económica, Turquía siguió siendo
un bastión de gran magnitud estratégica entre el mar Negro
y el Mediterráneo, sostenido por Occidente y líder de una
gran cantidad de Estados turcófonos que incluyen a las Repúblicas
Centrales Asiáticas -excepto Tadjikistán- y a Azerbaiján.
Además Turquía y Grecia son los pilares de la Zona de Cooperación
Económica del Mar Negro, organismo regional de gran envergadura
con el que colaboran la UE y el Banco Mundial integrado además
por Rusia, Ucrania, Moldova, Rumania, Bulgaria, Armenia, Albania, Georgia
y Azerbaiján.
La puesta en marcha del Proceso de Cooperación del Mediterráneo
Occidental en 1990 fue una iniciativa pionera en la medida que permitió
identificar la importancia estratégica del diálogo entre
Europa y el Maghreb y para poner en marcha el proceso de paz, estabilidad
y desarrollo en la región. Este diálogo fue relanzado en
la reunión celebrada en Lisboa en enero de 2001 -previa reunión
preparatoria en Túnez, a mediados de ese mismo mes-. Este proceso
fue la base de otras iniciativas regionales como el Foro del Mediterráneo
y del Partenariato euromediterráneo.
El Proceso de Cooperación del Mediterráneo Occidental no
se propone ni sustituir ni superponerse a otras iniciativas sino aportar
elementos en forma complementaria a fin de incrementar las oportunidades
de reencuentro entre los países de la región. Los ministros
participantes declararon que una verdadera identidad mediterránea
reclama el esfuerzo de un partenariato solidario y la búsqueda
de intereses comunes sobre una base paritaria entre los países
miembros del diálogo. Frente a la globalización actual los
ministros convinieron en sostener las iniciativas destinadas a acelerar
la dinámica de la integración regional y mejorar el atractivo
de las inversiones, principalmente en la región del Maghreb. Para
ello sugirieron para 2001 reuniones periódicas: a) entre empresarios
y representantes gubernamentales (en un país del Maghreb y en Francia);
b) para identificar las oportunidades de inversiones (en Marruecos); c)
para implementar medidas tendientes a facilitar las oportunidades comerciales
y promover el desarrollo de intercambios S-S y N-S entre los países
del Mediterráneo Occidental (en Túnez). Además propusieron:
d) el encuentro de personalidades de los medios universitarios y culturales
(en Malta); e) coordinar actividades relativas a "intercambios humanos"
(en Túnez): d) lograr el reencuentro y una mejor comprensión
entre los pueblos de la región para tratar temas de infraestructura
(en Argelia) y e) de análisis del impacto de la globalización
en la región (a celebrarse en Mauritania).
Otro hecho destacado fue la creación de la Comunidad Económica
Eurasiática el 31 de mayo 2001, conformada por Belarús,
Kazakhstán, Kirghizstán, la Federación de Rusia y
Tadjikistán y cuyo objetivo prioritario es la integración,
libre intercambio, unión aduanera plena y el establecimiento de
un espacio económico unificado y abierto a otros Estados, principalmente
los que integran la Comunidad de Estados Independientes. También
acordó gran atención al desarrollo de la cooperación
multilateral en el dominio de la seguridad de los Estados y sus ciudadanos,
principalmente en materia de lucha contra la criminalidad, el terrorismo
internacional y otros fenómenos extremistas para lo cual trabajarán
en integración en materia económica militar.
Bulgaria, Georgia, Rumania, la Federación de Rusia, Turquía
y Ucrania firmaron el 2 de abril 2001 en Estambul el Acuerdo procediendo
a la creación del Grupo de Cooperación Naval del Mar Negro
(BLACKSEAFOR). La iniciativa de este grupo tiene como objetivo el refuerzo
de la paz y de la estabilidad en el mar Negro así como la promoción
de la cooperación regional entre los Estados ribereños del
mar Negro. El objetivo de esta iniciativa es contribuir a la profundización
de la seguridad regional, de la amistad, de las buenas relaciones y del
entendimiento mutuo entre los Estados ribereños del mar Negro.
El Comité de Ministros del Consejo de Europa focalizó su
atención en su reunión de mayo en el tema de la estabilidad
democrática en los Balcanes y discutieron en particular la situación
en la Ex República Yugoslava de Macedonia y las perspectivas para
una temprana accesión de Bosnia y Herzegovina y la República
Federal de Yugoslavia al Consejo de Europa, con el objetivo de llevar
estabilidad democrática a la región. La otra cuestión
tratada fue la situación en el Cáucaso y específicamente
discutieron el diálogo entre Armenia y Azerbaiján para el
cumplimiento de los compromisos entre ambos países en el contexto
de su accesión al Consejo de Europa, la situación en Georgia
y la cooperación con la Federación de Rusia respecto de
a restauración del imperio de la ley, respeto de los derechos humanos
y democracia en la República de Chechenia. Por último solicitaron
un sustancial incremento en la cooperación entre el Consejo de
Europa y Ucrania. Una rápida implementación del plan de
acción respecto de los medios debería, en particular, permitir
el mejoramiento del marco legislativo en conformidad con los standards
del Consejo de Europa y promover el desarrollo de una prensa libre, independiente
y pluralista. También sostuvieron que la firma de la Declaración
Conjunta de Partenariato y Cooperación entre la Comisión
Europea y el Consejo de Europa dará nuevos ímpetus para
actividades conjuntas y proyectos.
También en mayo se realizó la Cumbre de jefes de Estado
de Armenia, de Belarús, de Kazakhstán, de Kirguizstán,
de Rusia y de Tadjikistán cuyos representantes afirmaron la determinación
de colaborar para llevar la paz y la calma a Asia central. En este contexto,
tomamos nota de la importancia que reviste la formación, por los
Estados parte del Tratado de Seguridad Colectiva, de Fuerzas Colectivas
de Desplazamiento Rápido, a fin de neutralizar el foco de tensión
que constituye Afganistán y contribuir por todos los medios a un
reglamento político del conflicto afgano, bajo la égida
de las Naciones Unidas.
B-. La etapa iniciada en septiembre se caracterizó por las dificultades
de una acción integrada referida a la coalición contra el
terrorismo en Afganistán y la aproximación de los presidentes
de Rusia y EE.UU. La visita del Presidente ruso a su par estadounidense
en Washington, el 13 de noviembre 2001, se coronó con diversas
declaraciones comunes, referidas a Afganistán, a las nuevas relaciones
entre los Estados Unidos y Rusia contra el terrorismo, la inestabilidad
regional y otras amenazas contemporáneas, a profundizar las relaciones
entre OTAN-Rusia y en el seno de la OSCE. También acordaron nuevas
relaciones económicas entre ambos Estados y utilizar los instrumentos
del comercio mundial a fin de mejorar los contactos entre ellas y consolidar
la integración de Rusia en la economía mundial, incluyendo
la OMC. Como parte del mismo evento ambos presidentes sostuvieron la necesidad
de cooperación en materia de lucha contra el tráfico ilegal
de estupefacientes. el crimen transnacional organizado, sobre la cooperación
contra el bioterrorismo y el empleo de armas de destrucción masiva.
En esta segunda etapa el rol de Europa fue importante pero menor del
deseado. Además del accionar del Reino Unido en las acciones bélicas
y en la dirección de la fuerza para la paz -ISFOR- en Kabul, las
Naciones Unidas convocaron a una Cumbre en Bonn, el 5 de diciembre 2001,
para poner fin al conflicto trágico en Afganistán y promover
la reconciliación nacional, una paz duradera, la estabilidad y
el respeto de los derechos del Hombre en el país. Se estableció
que a partir del 22 de diciembre 2001, el gobierno estaría a cargo
de una Autoridad interina -Hamid Karzai- que deberá convocar a
una Loya Jirga en junio de 2002 para conformar un gobierno transicional.
Ex URSS 2001
1. La Federación Rusa: ¿el fin de la política pendular?
Los temas económicos en la Federación Rusa se centraron
en tres aspectos relevantes: el primero se refiere a la cuestión
de su deuda, otro al cambio en la estructura de propiedad y finalmente
el referido a la cuestión petrolera.
A inicios del año el presidente Putin anunció el no pago
de las deudas al Club de París, tema que fue tratado en la visita
del Canciller alemán Gerard Schroeder -ese país es el principal
inversor en Europa Oriental-, y para inicios del mes de febrero se anunció
en Viena una forma de pago sobre la base de la venta de bienes públicos.
El 14 de ese mes el Primer Ministro, Mijail Kassianov, anunció
el reinicio de los pagos sobre una renegociación de los cuarenta
y ocho mil millones de dólares con esa agrupación financiera
internacional.
Por otra parte, el Asesor Económico del presidente, Andrei Illarionov
rechazó los créditos y el monitoreo del FMI, cuestión
que plantea dudas entre los inversores y acreedores externos. La falta
de regularización de los pagos llegó a un punto tal que
dos aviones (un Su 30Mk y un Mig AT) fueron retirados de la exposición
anual de Le Bourguet en Francia ante la amenaza de ser embargados por
deudores del Estado ruso.
El régimen de propiedad fue liberalizado por el nuevo código
de propiedad que afecta tanto a los terrenos urbanos como a los industriales
aunque excluyó a las parcelas rurales.
A fines de noviembre la OPEP pidió a la Federación Rusa
que bajara su producción y exportación de petróleo
para mantener los precios internacionales.
Para la actividad espacial el año 2001 estuvo marcado por el cierre
de una etapa y el inicio de otra, signada por las dificultades económicas.
El retiro de servicio y destrucción de la estación orbital
MIR -último vestigio de la presencia soviética en el espacio-,
debido a dificultades económicas abrió paso al turismo espacial.
Esta nueva actividad permite a la Agencia Espacial rusa conseguir nuevas
formas de financiación a sus alicaídas arcas: el multimillonario
Dennis Tito pagó 20 millones de dólares por su viaje a la
Estación Alfa.
La situación interna estuvo marcada por intentos por parte del
Kremlin de aumentar su control sobre la sociedad civil. Por ejemplo, se
propugnó un nuevo sistema electoral tendiente a reducir el número
de partidos políticos en Rusia e intentó también
realizar un cambio en el sistema judicial. La oposición denunció
que la voluntad oficial es liquidar el poder judicial. Otro aspecto es
el incremento del control de los medios: se producen cambios en los directivos
en la única cadena de televisión privada rusa NTV, este
hecho es denunciado como una maniobra del Kremlin para limitar la libertad
de prensa. El accionista mayoritario del canal es la empresa estatal Gazprom
y los temores iniciales, a pesar de las desmentidas oficiales, confirmaron
el proceso de estatización. También, el Kremlin tomó
el control de la radio independiente Eco de Moscú.
Existieron también cambios significativos en el gabinete, ya que
luego de un nuevo aniversario de la elección de Putin se reemplaza
a los ministros de Defensa e Interior, heredados de la administración
Yeltsin, por hombres de su extrema confianza. También fueron reemplazados
los titulares de Energía Nuclear y Policía Tributaria.
La ascendente espiral de violencia en la secesionista república
de Chechenia siguió su curso. Allí las tropas federales
incrementaron la represión interna y los rebeldes produjeron un
sinnúmero de acciones terroristas que fueron desde atentados con
bombas en diversas regiones del país hasta piratería aérea.
El nivel de violencia obligó a las agencias humanitarias que operaban
en esa República a retirarse a principios de año pero no
impidió al gobierno ruso apoyar las tareas represivas de las fuerzas
antiterroristas de la FSB (ex KGB) a pesar de los fuertes cuestionamientos
en el ámbito internacional -donde Rusia no pudo evitar la nueva
sanción por parte de la Comisión de Derechos Humanos de
la ONU- e incluso a escala local a través de la prensa. Producto
de esto último, el Ejército ruso arrestó a una periodista
de la Novaia Gazeta por sus declaraciones sobre la crisis en Chechenia.
En el ámbito europeo, el Consejo de Europa levantó la sanciones
sobre Rusia, pero esta acción contrasta con el rechazo que generaron
las palabras de Putin en la reunión de la Unión Europea
en Estocolmo donde comparó el conflicto de Chechenia con el de
Macedonia en marzo.
Un dato para nada menor es la visita iniciada por Ilia Amodov, Ministro
de Relaciones Exteriores de Chechenia a Estados Unidos. Esto es tomado
por Moscú como una muestra más de la injerencia norteamericana
en un conflicto que los rusos consideran interno.
A fin de volcar el conflicto checheno en su favor, Putin estimó
que el atentado del 11 de septiembre fue producto del mismo desafío
que ellos enfrentan en la zona del Cáucaso.
Con anterioridad a ese suceso, en mayo el presidente de Rusia, buscó
acordar con cinco repúblicas ex soviéticas (Armenia, Belarús,
Kirguizistán, Tayikistán y Kazajstán) la creación
de una fuerza conjunta de reacción rápida para responder
ante los extremistas islámicos y el creciente narcotráfico.
El aumento de la violencia federal y separatista no impidió que
el 18 de noviembre se realizase la primera reunión oficial entre
rusos y chechenos por la situación en esa región separatista.
La política internacional de la Federación Rusa estuvo marcada
por el atentado de septiembre. En la primera mitad del año se produjeron
fuertes fricciones con Estados Unidos (por las denuncias de espionaje
y el Escudo Antimisilítico) que fueron virando hacia una complementación
de la estrategia norteamericana, llegando a presionar a muchas ex Repúblicas
Soviéticas para que accedieran a los pedidos de la administración
de George Bush.
Para evitar la presión norteamericana, Moscú siguió
una estrategia pendular reforzando sus lazos tanto con otras potencias
occidentales como hacia el oriente. En el primero de los casos la visita
de Gerard Schroeder -que es definido como el principal aliado ruso- y
la firma de los acuerdos de defensa mutua en materia militar y espacial
son un dato significativo. Es para resaltar la visita del Presidente francés
Jacques Chirac en julio, donde el mandatario galo exaltó la buena
relación entre la Federación y la Unión Europea.
Es evidente que con estas visitas Putin buscó reafirmar su posición
frente a los Estados Unidos apoyándose en las naciones de Europa
Occidental.
Pero este no fue el único frente, ya que también recibió
en marzo al presidente iraní, Mohamed Jatami, propuso en Moscú
luchar contra la injerencia extranjera en la zona del mar Caspio, Asia
Central y Oriente Medio y dijo que Rusia debe tener el rol de gendarme
regional. También hizo lo propio en la recepción del presidente
de Corea del Norte en Moscú, gesto que causó malestar en
Washington dada la estigmatización de ese país como un estado
bandido.
La decisión de la nueva administración norteamericana de
expandir a la OTAN hasta la frontera de la Federación y el despliegue
de un escudo antimisiles (NMD) produjo una reacción de rechazo
por parte de la administración Putin.
La hostilidad también se manifestó en denuncias cruzadas
de espionaje que ocuparon gran parte de la agenda de ambos países.
El 17 de febrero fue detenido Robert Hanssen un agente del FBI que en
agosto se declaró culpable de vender secretos claves a Moscú.
Días después, a pesar del silencio oficial ruso, los medios
de comunicación de Rusia consideran que esta acción fue
producto de una campaña antirusa. Como represalia en Moscú
fue encarcelado un científico ruso, Igor Suteguin, acusado de trabajar
para servicios extranjeros.
En marzo se reveló la existencia de un túnel por debajo
de la Embajada Rusa en Washington por donde se espiaban sus actividades.
Tras estos sucesos ambos gobiernos expulsaron cincuenta funcionarios de
sus respectivas embajadas en Washington y Moscú
En el ámbito de la disputa misilistica, como una muestra de su
oposición a la construcción del NMD, Rusia disparó
tres misiles estratégicos que impactaron en el polígono
de Kamchatka en febrero
En mayo, ante el anuncio de George Bush de la construcción del
escudo antimisiles, el ministro de Relaciones Exteriores, Igor Ivanov
señalo que Estados Unidos no debe dar pasos unilaterales.
En junio un incendio de origen desconocido destruyó tres rampas
y doce misiles nucleares que protegen a Moscú generando preocupación
en los ámbitos militares
En la Reunión de la OTAN de Junio en Eslovenia, el presidente George
Bush aceptó incorporar a esa organización a países
ex miembros de la URSS. Incluso en la cumbre entre Bush y Putin, el líder
ruso anticipó que si Washington decide unilateralmente el escudo
antimisiles se "complicarán las relaciones" y calificó
al ABM como la "piedra angular de la seguridad internacional".
Putin informó de esta conversación a Zemin y le señaló
que existían perspectivas realistas para un dialogo significativo
y constructivo con Washington.
Tras algunos zigzagueos, que incluyeron la amenaza de aumentar su arsenal
nuclear, Putin señaló que no excluye modificar el tratado
ABM de 1972 para acercarse a los Estados Unidos.
Como una forma de aumentar la presión en contra del NMD, en julio,
los presidentes ruso y chino firmaron un pacto estratégico de amistad,
cooperación y comercio y se manifestaron en contra de este proyecto
de la Casa Blanca.
Incluso en sectores vinculados al ejército ruso, como Igor Sergueyev,
ex Ministro de Defensa ruso y actual asesor del presidente señaló
que el despliegue del escudo antimisiles puede ser visto como un acto
de hostilidad norteamericano.
A pesar del incremente del duelo verbal, el 22 de julio se anunció
el inicio de la negociación de un pacto entre Rusia y Estados Unidos
para reducir las ojivas atómicas además de rediscutir la
validez del ABM y del Start II. A principios de agosto, Putin admitió
flexibilizar el tratado ABM y dijo que si Estados Unidos avisa previamente
podría instalar silos de cohetes para interceptar misiles.
Esta tendencia negociadora se reforzó tras el atentado, ya que
junto a la OTAN se comprometieron a no dejar sin castigo a los terroristas
y dejan de lado sus diferencias ante el escudo antimisiles.
Incluso en noviembre el presidente Putin fue más allá, ya
que admitió que los Estados Unidos puede desplegar el Escudo en
la medida que el tratado ABM de 1972 no sea violado si bien teóricamente
estos sistemas están prohibidos por el mismo.
Esta tendencia negociadora se confirma durante la visita de tres días
que el presidente ruso realizó a los Estados Unidos. El día
13 de noviembre Washington y Moscú firmaron una importante reducción
de armamentos nucleares como una muestra más de su acercamiento.
Un dato adicional es la situación armamentista rusa. En febrero
el encargado de la Comisión Gubernamental Investigadora del hundimiento
del Kursk, Valeri Dorogin, reveló que un caño lanzatorpedos
desajustado o un torpedo dañado fueron las causas del hundimiento
del submarino ruso Kursk que en octubre fue reflotado. El incendio de
origen desconocido que destruyó tres rampas y doce misiles nucleares
que protegen a Moscú puede demostrar también la falta de
mantenimiento del arsenal ruso. Putin convenció a los jefes militares
del Kremlin que esto había sido un accidente. A pesar de esta situación
un informe del Congreso norteamericano señala que Rusia ha vendido
armas por siete mil setecientos millones de dólares.
Dentro de esta política de acercamiento se confirma el cierre de
la base militar espía rusa en Cuba, lo que ocasiona la protesta
del gobierno de Castro.
Por otro lado, el presidente ruso estima que el atentado del 11 de septiembre
es un desafío a la humanidad, lo compara con la situación
chechena y afirma que tales actos no pueden quedar impunes aunque señala
que los Estados Unidos no pueden actuar como un bandido en la represalia.
En el marco de la guerra de Afganistán, los rusos incrementaron
la ayuda militar a la Alianza del Norte en Afganistán y definen
pelear conjuntamente contra el terrorismo a cambio de habilitar la entrada
de Rusia a la OMC. Con este acuerdo Moscú presionó a los
gobiernos de Tayikistán y Uzbekistán para que facilitaran
las operaciones militares.
En una nueva muestra de su diplomacia pendular Putin acuerda con Zemin
un reclamo para que los Estados Unidos reduzcan la operación a
un tiempo lo más breve posible.
Producto del desarrollo de la guerra en Afganistán, a fines de
noviembre, los rusos ingresan nuevamente en Kabul, tras doce años.
Existió un fuerte rechazo de la población afgana.
A fin de año, las autoridades uzbecas reabren el llamado puente
de la Amistad sobre el río Amú Dariá, con la frontera
afgana tras haber sido cerrado al tráfico hace casi cinco años,
cuando los talibán ocuparon esa zona del país.
El viceministro tayiko de Situaciones de Emergencia, Abdurajim Radzabov
anuncia que Rusia envió más de 100 toneladas de ayuda humanitaria
a Kabul a través del río Amu Daria.
En el marco de esta nueva distensión, producto de la guerra contra
Al Qaeda, Moscú propone al Grupo de los
Ocho países más importantes (G-7 más RUSIA) emitir
una declaración conjunta expresando su preocupación por
el conflicto entre India y Pakistán e instar a ambos Estados a
retomar "el diálogo político".
2. Dentro del ámbito de la ex Repúblicas Soviéticas
En la reunión del 25 de enero del Consejo de Europa, el presidente
azerí, Gueidar Aliev denunció la agresión armenia
que ocupa un 20 % de su territorio -Alto Karabaj- y que la comunidad internacional
"observa en silencio esta tragedia." El mes siguiente el presidente
armenio, Robert Kocharian, visitó Francia para conseguir más
apoyos políticos para su país en esa lucha.
El 9 de septiembre Lukachenko es reelegido como presidente de Belarús
por un 75 % de los votos emitidos.
La situación de Ucrania está atravesada por una fuerte crisis
política que se manifiesta en importantes manifestaciones en contra
de las autoridades de Kiev que son ferozmente reprimidas durante el mes
de febrero y llevan a que el Parlamento censure al Primer Ministro Viktor
Iuchenko en marzo. A medida que se agudiza la crisis política el
gobierno gira hacia el autoritarismo y se acerca a Moscú, causando
mayor rechazo en la población de ese país.
En junio el Papa Juan Pablo II inicia una visita a Ucrania donde recibió
una fría recepción de los ortodoxos ucranianos. A pesar
de los llamados de unidad de católicos y ortodoxos, tuvo poca recepción
en la Iglesia Ortodoxa de Kiev y la asistencia a su misa fue menor a la
esperada. No fue así en el homenaje a las víctimas del nazismo
en el monumento de Babi Yar y recibió una entusiasta bienvenida
en Lvov donde les habló a los jóvenes sobre la esclavitud
el consumismo, culminando esta polémica visita a Ucrania con la
celebración de una misa a la que asistieron más de un millón
de fieles.
El otro hecho relevante en Ucrania fue la caída de un avión
de pasajeros TU 158, si bien en un primer momento se pensó en un
atentado fundamentalista islámico, luego se encontraron restos
de un misil S-200 que descartaron esa hipótesis.
En Kazajstán tuvo lugar en septiembre una gira papal con fuerte
protección ante un posible ataque terrorista. Allí el Papa
hizo un llamado a cristianos y musulmanes a rezar por la paz en Kazajstán
y justificó que Estados Unidos usara las armas contra el terrorismo
en su última jornada de Kazajstán.
Uzbekistán, a pesar de su negativa inicial, junto con Tayikistán
y tras el acuerdo ruso norteamericano de principios de octubre brindaron
su apoyo logístico para las operaciones militares en Afganistán.
Isabel Stanganelli
Coordinadora del Depto. Europa y CEI
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